La UE «debe mostrar determinación y dejar claro que cualquier tercer país que intente violar la soberanía de un Estado miembro se enfrentará inmediatamente a represalias», señala el documento.
El Parlamento Europeo aprobó este jueves una resolución que insta a los Estados miembros de la Unión Europea a adoptar «acciones coordinadas, unidas y proporcionadas contra todas las violaciones de su espacio aéreo, incluido el derribo de amenazas aéreas«.
La iniciativa fue aprobada con 469 votos a favor, 97 en contra y 38 se abstuvieron.
Según el documento, los eurodiputados «condenan enérgicamente las acciones imprudentes y de escalada de Rusia, que ha violado el espacio aéreo de Polonia, Estonia, Letonia, Lituania y Rumanía, de los Estados miembros de la UE y la OTAN». Denuncia también supuestas «incursiones deliberadas con drones contra infraestructuras críticas en Dinamarca, Suecia y Noruega».
«Los eurodiputados alientan cualquier iniciativa que permita a la UE y a sus Estados miembros adoptar ‘acciones coordinadas, unidas y proporcionadas contra todas las violaciones de su espacio aéreo, incluido el derribo de amenazas aéreas’, y acogen con satisfacción el concepto de un muro antidrones de la UE y las iniciativas de vigilancia del flanco oriental», destaca.
La resolución exige además a la UE mostrar determinación y que deje en claro que cualquier tercer país que intente «violar la soberanía de un Estado miembro se enfrentará inmediatamente a represalias». También insta al Consejo Europeo y a la Comisión Europea a aumentar «la eficacia y el impacto» de las sanciones contra Rusia.
Asimismo, el Parlamento instó a la UE y a sus Estados miembros a dotar a las autoridades correspondientes de «los medios adecuados» para contrarrestar la supuesta ‘interferencia’ de drones rusos en infraestructuras críticas.
Las resoluciones del Parlamento Europeo tienen carácter consultivo, por lo que las instituciones de la UE no están obligadas a aplicarlas.
Drones no identificados provocan histeria en Europa
A última hora de la tarde del 25 de septiembre y durante la noche del 26 de septiembre, varios vehículos aéreos no tripulados no identificados fueron vistos sobrevolando aeropuertos e instalaciones militares en el norte y el sur de Dinamarca, incluidos los aeropuertos de Aalborg, Esbjerg y Sonderborg y la base aérea de Skrydstryp, donde se encuentra la flota danesa de cazas F-16 y los recién llegados F-35.
Las autoridades no pudieron determinar el modelo de estos vehículos aéreos, su origen ni el motivo de su presencia. El ministro de Defensa, Troels Lund Poulsen, calificó el hecho como «un ataque híbrido».
El día anterior se cerró el espacio aéreo de la ciudad de Aalborg tras avistarse drones cerca de su aeropuerto. El 22 de septiembre se cancelaron los vuelos en el aeropuerto de Copenhague Kastrup, situado en la isla de Amager, tras detectarse varios vehículos aéreos no tripulados sobrevolando la zona. Paralelamente, se reportó otro incidente con drones en Oslo, según medios noruegos.
Posteriormente, se informó que las Fuerzas Armadas de Dinamarca han convocado de urgencia a cientos de soldados de la reserva para prestar servicio en el país debido a la situación actual con drones en su espacio aéreo.
Anteriormente, el 10 de septiembre, Polonia acusó a Rusia de una incursión en su espacio aéreo con al menos 19 drones, lo que Moscú descartó y calificó como «histeria» destinada a crear la imagen de una «amenaza rusa» inexistente.
Supuesta ‘amenaza rusa’
Desde el Kremlin, calificaron de infundadas las acusaciones de que Rusia haya violado el espacio aéreo de algún otro Estado, agregando que «no se presentó ninguna prueba convincente de ello». «Insistimos en que todos nuestros vuelos se realizan en estricto apego a las regulaciones internacionales», subrayó el vocero presidencial ruso, Dmitri Peskov. Además, tachó anteriormente las declaraciones de varios representantes europeos de que hay que derribar aviones rusos de «imprudentes e irresponsables«, así como «peligrosas por sus consecuencias».
A su vez, el líder ruso, Vladímir Putin, en repetidas ocasiones ha señalado que su país no tiene intención alguna de atacar países europeos. Recientemente, durante su intervención en la sesión plenaria del XXII Foro Internacional de Discusiones Valdái, Putin instó a los políticos europeos que hablan sobre una supuesta ‘amenaza’ rusa a calmarse, dormir tranquilos y concentrarse en sus propios problemas.
«Sabemos perfectamente que todas las amenazas sobre los planes agresivos de Rusia, con las que Europa se intimida a sí misma, son inventadas», enfatizó. «Quieren superar la división y reforzar una unidad tambaleante —de la que antes tanto se jactaban— no mediante la solución efectiva de sus problemas internos, sino a costa de inflar la imagen de un enemigo. […] Con ello, recrean a un enemigo habitual, inventado hace ya siglos: Rusia», criticó.