Masoud Pezeshkian afirmó que «los descarados cálculos de los oponentes de Irán no perturbarán la unidad nacional» del país.
El presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, ha afirmado en la Asamblea General de la ONU que su país nunca se arrodillará ante un agresor. El mandatario se refirió de esta forma a Israel, mientras comentaba la ofensiva del país hebreo contra la Franja de Gaza.
«Irán, la civilización más antigua del planeta, siempre se ha opuesto a esto. Nuestro país, con su voluntad, demuestra una vez más que jamás nos arrodillaremos ante un agresor», declaró.
«Los descarados cálculos de los oponentes de Irán no perturbarán la unidad nacional; nos oponemos a las sanciones económicas y a la guerra psicológica destinadas a sembrar la discordia en nuestro suelo», manifestó el mandatario.
El presidente iraní considera «evidente que el régimen sionista y sus partidarios no se conforman» con normalizar la situación en la región mediante la influencia política. «Imponen su presencia mediante el uso de la fuerza. Esto no es paz ni fuerza, sino agresión, basada en la intimidación y la coerción», denunció.
‘Guerra de 12 días’
En junio, Irán e Israel se vieron involucrados en el conflicto conocido como la ‘guerra de los 12 días’. La madrugada del 13 de junio, Israel lanzó un ataque no provocado contra Irán, lo que generó un intercambio de ofensivas con misiles y drones entre ambas naciones. Durante la ‘guerra de 12 días’, los objetivos del país hebreo fueron las instalaciones nucleares de la república iraní, comandantes militares, altos cargos, así como científicos nucleares. Varios de ellos fueron asesinados junto con familiares.
El enfrentamiento se intensificó cuando EE.UU. se unió a la agresión, atacando tres importantes instalaciones nucleares iraníes. Teherán respondió a la ofensiva estadounidense lanzando un ataque contra la base militar más grande del país norteamericano en Oriente Medio, ubicada en Catar.
El 24 junio, Tel Aviv y Teherán anunciaron un alto el fuego que puso fin a los enfrentamientos.