París, 18 sep. Dirigentes políticos y sociales franceses acusaron hoy al ministro del Interior dimitente, Bruno Retailleau, de criminalizar las protestas, en una jornada de movilización sindical contra las políticas económicas del Gobierno.
Según el líder de La Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, el ministro necesita la violencia, calificándolo de «provocador ambulante».
Las acciones violentas solo sirven a una persona: Retailleau, quien necesita contenedores de basura que ardan para presentarse como un salvador, estimó.
Por su parte, la secretaria general de la Confederación General del Trabajo (CGT), Sophie Binet, advirtió en una de las movilizaciones que el titular del Interior del recién derribado Gobierno echa leña al fuego con el enorme despliegue policial en curso.
Alrededor de 80 mil policías y gendarmes, 24 vehículos blindados Centauro y 10 cañones de agua están desplegados, una fuerza que Binet tildó de sin precedentes.
Retailleau dijo que prevé hechos violentos durante las protestas y anticipó que las autoridades serán intransigentes, atribuyendo a la extrema izquierda la voluntad de hacer daño.
El gobierno espera hasta 900 mil personas en las calles y los sindicatos a muchas más en su reclamo de mejoras salariales, la eliminación de la reforma de la jubilación y un presupuesto del Estado 2026 que no ponga a los trabajadores como los grandes perdedores de las medidas de austeridad.⁶⁶
De acuerdo con el ministro del Interior, hasta las 11:00, hora local, se produjeron 58 detenciones a nivel nacional.