París, 17 sep. Autoridades francesas confirmaron hoy el despliegue de 80 mil policías y gendarmes apoyados por blindados y cañones de agua para la jornada de protestas de mañana, convocada por sindicatos en rechazo a las políticas económicas.
El ministro del Interior dimitente, Bruno Retailleau, admitió que será un día complejo, en el cual las fuerzas del orden responderán de manera masiva.
Según el integrante del derrocado Gobierno de François Bayrou, se esperan manifestantes violentos, que intenten realizar bloqueos, como en la movilización de hace una semana, que dejó más de 600 arrestos.
La intersindical, grupo que aglutina a los principales sindicatos franceses, convocó a sus afiliados a salir a las calles en reclamo de mejoras para la clase trabajadora y en rechazo a cualquier presupuesto 2026 que la afecte.
Medios como BFM TV califican de sin precedentes la movilización de 24 blindados Centauro y 10 cañones de agua frente a una protesta en esencia pacífica.
El 10 de septiembre fueron unos 200 mil los franceses que protestaron, cifra que podría quintuplicarse mañana.
Reclamos como la eliminación de la reforma de jubilación se escucharán este jueves.
El nuevo primer ministro, Sébastien Lecornu, ha recibido a los sindicatos para tratar de calmar el malestar popular, sin conseguir mucho.
