Geng Shuang instó al país hebreo a cumplir «con sus obligaciones» y «aliviar eficazmente la catástrofe humanitaria» en el enclave palestino.
La situación en la Franja de Gaza «se ha convertido desde hace un tiempo en un infierno, con dos millones de habitantes atrapados en una catástrofe provocada por el hombre y más de un millón enfrentándose a una emergencia de seguridad alimentaria», aseguró este miércoles el representante de China ante la ONU, Geng Shuang.
«Desde el comienzo, el mayor desafío para ampliar la asistencia humanitaria en Gaza no ha sido la escasez de suministros ni las deficiencias de la ONU y otras organizaciones humanitarias, sino la falta de voluntad política por parte de Israel, la fuerza ocupante, y los obstáculos que ha creado deliberadamente«, aseveró al intervenir en una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU para discutir la campaña militar israelí en Gaza y Cisjordania.
Geng instó al país hebreo a cumplir «con sus obligaciones como fuerza ocupante, en virtud del derecho internacional humanitario», y abrir todos los pasos fronterizos, restablecer plenamente el acceso de ayuda y apoyar a la ONU en su distribución para «aliviar eficazmente la catástrofe humanitaria» en el enclave palestino.
«China se opone y condena todas las acciones que perjudican a la población civil, dañan las infraestructuras y violan el derecho internacional. Instamos a Israel a atender los enérgicos llamamientos de la comunidad internacional, cesar inmediatamente sus operaciones militares en Gaza y poner fin a cualquier acción peligrosa que agrave las tensiones», insistió.
Asimismo, hizo un llamado a la comunidad internacional para «hacer todo lo posible para evitar un mayor deterioro de la situación«, no seguir ignorando «el derecho del pueblo palestino a la autodeterminación, a la supervivencia y al retorno» y revitalizar las perspectivas de una solución de dos Estados.