Bucarest, 6 ago. Los rumanos dieron hoy el último adiós al expresidente Ion Iliescu, fallecido la víspera a los 95 años de edad tras casi dos meses hospitalizado por un cáncer de pulmón.
El féretro se encuentra en el Palacio Presidencial Cotroceni de esta capital, a donde acudieron muchos ciudadanos para despedirse del mandatario.
La Guardia de Honor de la presidencia le rindió homenaje en un acto seguido por una misa religiosa.
El exdirigente socialdemócrata, presidente de Rumanía entre 1990 y 1996, y entre 2000 y 2004, será enterrado mañana, jueves, en un funeral de Estado en el cementerio militar Ghencea 3, de esta capital, en una ceremonia reservada únicamente a familiares y personas cercanas.
Algunos líderes políticos, entre ellos los expresidentes del país Emil Constantinescu y Traian Basescu, varios miembros del Gobierno, antiguos colaboradores y miembros del cuerpo diplomático acudieron al Palacio presidencial para presentar sus respetos y para firmar en el libro oficial de condolencias.
Mañana será Día de Luto Nacional, en memoria del expresidente, con la bandera rumana ondeando a media asta en todo el país.
La víspera el primer ministro Ilie Bolojan consideró su fallecimiento como “el final de una etapa significativa en la historia reciente del país, marcada por la transición y transformaciones esenciales en la vida pública”.
Según Bolojan “durante su mandato, se adoptaron documentos y decisiones que influyeron en el rumbo de Rumanía”.
Iliescu se alejó de la vida política años atrás y fue acusado de crímenes contra la humanidad en abril de 2024 junto al ex primer ministro Petre Roman.
El caso en su contra fue suspendido por la Justicia en 2020, si bien se reanudó nuevamente en 2023.