Las autoridades gazatíes han reportado escasos envíos de ayuda, con solo 73 camiones durante el pasado fin de semana, muchos de los cuales sufrieron saqueos.
La situación humanitaria en Gaza se vuelve crítica, en medio de la desnutrición generalizada y de la intensificación de los ataques israelíes, que en las últimas horas ha costado la vida a más de 60 ciudadanos, incluidas 19 personas que buscaban ayuda humanitaria.
Mientras EE.UU. se niega a participar en una conferencia internacional sobre una solución de dos Estados para Israel y Palestina que acoge la ONU en Nueva York, desde Tel Aviv intentan mantener fuera de foco internacional la crisis humanitaria y la grave realidad que vive la población en el enclave palestino, en medio de las hostilidades.
Para ello utilizan diversos métodos para desinformar a la población sobre un supuesto aumento del volumen de la ayuda humanitaria o la apertura de nuevas rutas para su entrega, lo que no tiene reflejo en la práctica.
«Dicen que quieren enviar mucha ayuda e inundar el país con ella. Cada vez que escuchamos esto, solo son palabras. Pero en realidad, no pasa nada», se lamenta un ciudadano.
En este sentido, las autoridades gazatíes reportan escasos envíos de ayuda. De los 73 camiones que entraron en el sector durante el pasado fin de semana, muchos sufrieron saqueos a manos de bandas organizadas en medio de la falta total de seguridad. «Todo esto es una mentira y no se hizo realidad. Los puestos de control están cerrados y solo han dejado pasar a unos pocos camiones, muy pocos», denuncia otro gazatí.
Estas atrocidades ocurren en medio de declaraciones del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), que advierte que toda la población de más de dos millones de personas en Gaza enfrenta inseguridad alimentaria grave. En particular, reportan que una de cada tres personas no ha comido en días y que más de 40.000 niños menores de un año están en peligro de muerte por falta de leche.