Ottawa, 24 jul. Canadá llegará a un acuerdo comercial con Estados Unidos antes del 1 de agosto, plazo fijado por el presidente Donald Trump, solo si este resulta beneficioso para los canadienses, destaca hoy la prensa nacional.
Al terminar la reunión con los primeros ministros de las provincias y territorios, el primer ministro Mark Carney declaró este martes que el gobierno federal no aceptará un mal acuerdo, según el reporte de la Cadena Radio Canada International.
«Nuestro objetivo no es alcanzar un acuerdo cueste lo que cueste. Buscamos un acuerdo que beneficie a los canadienses», enfatizó.
Advirtió que, si bien las complejas negociaciones con Washington continúan, de no llegar a un resultado ventajoso para ambas partes, Ottawa evaluará la situación y definirá los pasos a seguir.
Durante la reunión, los líderes provinciales y territoriales asumieron una postura común, que respalda la decición de Carney, y expresaron «una enorme confianza en el primer ministro y en el equipo» que los representa durante las negociaciones con Washington.
Igualmente, coincidieron en que Canadá debe «centrarse en lo que va a fortalecer» la economía, en lugar de preocuparse tanto por lo que Trump hará a continuación.
La respuesta económica de Canadá a los aranceles estadounidenses se basa, hasta el momento, en dos principios: apoyar a las industrias afectadas, como la madera, el acero, la fabricación de automóviles y la producción de aluminio; y garantizar que la economía de Canadá crezca mediante la eliminación de las barreras comerciales internas y la aprobación de proyectos importantes.
En este sentido, el jefe de Gobierno canadiense aseguró que su nueva Oficina de proyectos federales estará abierta para el próximo mes de septiembre, lo que, según él, proporcionará un único punto de contacto para las provincias, empresas y comunidades que buscan obtener la aprobación de importantes proyectos de construcción de infraestructuras en el país.
En una acción que busca garantizar la seguridad energética de la nación de América del Norte, los primeros ministros de Ontario, Saskatchewan y Alberta firmaron un memorando de entendimiento para la construcción de una nueva infraestructura energética y comercial.
Ante el incierto futuro de las relaciones con Estados Unidos, coincidieron también en la necesidad de reemplazar la Línea 5, un oleoducto de más de mil kilómetros que transporta 540 mil barriles de petróleo y líquidos de gas natural diariamente desde Canadá, a través de Wisconsin y Michigan, hasta llegar a las refinerías de Sarnia, en la provincia de Ontario.
En sus declaraciones Carney insistió en que un buen acuerdo reforzaría la relación comercial exitosa y de larga data de Canadá con Estados Unidos, pero no impediría que el país amplíe las relaciones con otras naciones en el mundo.