Berlín, 23 jul. El gobierno alemán prepara una reforma legal que ampliará las sanciones por los delitos de terrorismo y espionaje que podría aprobarse este otoño, según avanzó hoy el diario Stuttgarter Zeitung.
Impulsado por la ministra de Justicia, Stephanie Hubig, el proyecto tipificará como delito la entrada al país con fines terroristas y la preparación de atentados con objetos cotidianos como vehículos o cuchillos.
Hasta ahora el código penal no contemplaba específicamente estos supuestos.
El modelo busca responder a amenazas como ataques con objetos peligrosos de uso común, según el texto legislativo.
Las nuevas normas facilitarán además la vigilancia de presuntos agentes extranjeros y castigarán con mayor dureza las actividades de inteligencia realizadas por cuenta de otros Estados.
Analistas señalan que la iniciativa refleja la creciente preocupación por la seguridad tras varios casos recientes de espionaje atribuidos a Rusia y China en territorio alemán.
El gabinete federal analizará la propuesta en septiembre, con expectativa de que el Bundestag (Parlamento alemán) la apruebe antes de finales de año.
Hubig defendió la necesidad de adaptar el derecho penal a las nuevas formas de amenaza, en referencia a tácticas terroristas menos convencionales.
La reforma incluirá penas específicas para quienes vigilen a personas u organizaciones en Alemania por encargo de servicios secretos extranjeros.
