El gigante suramericano asume la presidencia pro tempore del bloque, con la mirada en convertirse en un «socio confiable» y lograr el acuerdo comercial con la UE.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, expuso este jueves los cinco lineamientos que seguirá en la presidencia pro tempore del Mercado Común del Sur (Mercosur), de cara a convertir al bloque en un «socio confiable» que haga frente a la incertidumbre comercial mundial.
Tras la apertura de la cumbre que se celebra en Buenos Aires, Lula enfatizó que entre las prioridades estará el fortalecimiento del comercio entre los países que integran el mecanismo y con los socios externos. Asimismo, habló de superar los retos de incluir los sectores automotor y azucarero en la unión aduanera del Mercosur.
Por otro lado, se refirió a reducir los costos cambiarios en las transacciones comerciales digitales, mediante la utilización de los conos monetarios de los países que integran el mecanismo.
El mandatario también aseveró que estaba «confiado» en que este fin de año serán firmados los acuerdos de libre comercio con la Unión Europea y la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA, por sus siglas en inglés). Del mismo modo, dijo que busca avanzar en los acuerdos comerciales con Canadá, Emiratos Árabes Unidos, Panamá y República Dominicana, además de actualizar los pactos con Colombia y Ecuador.
Una mirada a Asia
Lula aseveró que «es hora de que el Mercosur mire hacia el Asia», al que calificó como «el centro dinámico de la economía mundial».
Del mismo modo, adelantó que la mejora de la conectividad de la región mediante infraestructuras adecuadas, como el corredor Bioceánico, estarán en el radar de Brasilia para los próximos seis meses de presidencia rotatoria.
Con esta ambiciosa iniciativa que busca conectar los océanos Atlántico y Pacífico, por una vía que atraviesa a Brasil, Argentina, Paraguay y Chile, se reduciría hasta en dos semanas el tiempo de viaje de mercancías entre Suramérica y Asia, estimó Lula.
Asimismo, se pondrá la mirada en la ampliación de las capacidades tecnológicas y las estrategias de mitigación del cambio climático.

En este aspecto, el mandatario brasileño adelantó que por medio del programa Mercosur Verde se fortalecerá la agricultura sostenible. Lula recordó que la región cuenta con algunas de las reservas de minerales críticos del mundo, por lo que desea apuntar su oferta hacia otros países.
Otra de las prioridades será el combate a la delincuencia organizada, que «pone en jaque la autoridad del Estado», por lo que Brasil pedirá actuar de forma coordinada para «asfixiar los recursos que financian la industria del crimen», dijo Lula.
Por último, el mandatario se refirió a la necesidad de «promover los derechos de los ciudadanos». «Sin inclusión social y enfrentamiento de las desigualdades no habrá progreso verdadero», zanjó.
«Un gran bloque»
En su primer discurso en la presidencia ‘pro tempore’ del Mercosur, tras recibir el martillo de manos de su par, Javier Milei, Lula dijo que se comprometía a que se pudiera avanzar en «lo máximo que se pueda» para que el mecanismo se transforme «en un gran bloque económico, político, cultural, científico y tecnológico».
«Tenemos todas las condiciones, tenemos un pueblo generoso, un conocimiento científico y tecnológico, sabemos cómo hacer política, por lo tanto, solo depende de nosotros», expresó el mandatario.