El presidente ruso expuso los principios de Moscú para una solución pacífica de la crisis en una conversación telefónica.
Los presidentes de Rusia y Francia, Vladímir Putin y Emmanuel Macron, abordaron la situación en torno a Ucrania en una conversación telefónica que se llevó a cabo este martes.
El líder ruso le manifestó a su interlocutor que el conflicto es una consecuencia directa de la política de los gobiernos occidentales, que pasaron por alto los intereses de Rusia en materia de seguridad durante muchos años, forjaron en Ucrania una «cabeza de puente antirrusa» y contribuyeron a la violación de los derechos de la población rusoparlante, informa el Kremlin en un comunicado oficial. Ahora, sostuvo el mandatario, buscan alargar las acciones bélicas abasteciendo al régimen de Kiev de múltiples armamentos modernos.
Putin abordó las perspectivas de una solución pacífica y expuso los enfoques clave de los posibles acuerdos, «que deberán tener un carácter sistémico y a largo plazo, prever la eliminación de las causas profundas de la crisis ucraniana y basarse en la nueva realidad territorial».
La conversación entre ambos líderes «tuvo un carácter sustantivo», valoraron desde el Kremlin. Esta llamada fue la primera que realizaron desde septiembre de 2022 y se enfocó también en la situación que se vive en Oriente Medio, después de los intercambios de ataques entre Israel e Irán y los ataques de la Fuerza Aérea estadounidense contra varias instalaciones nucleares del país persa.