El expresidente de la Conferencia de Seguridad de Múnich sostuvo que Alemania y los demás miembros de la OTAN deben hacer todo lo posible para reducir su dependencia unilateral de EE.UU.
La reciente cumbre de la OTAN demostró «la drástica dependencia» que sigue teniendo Europa de EE.UU. y «las catastróficas consecuencias» que se tendrían lugar si Washington no la respaldara, expresó este lunes el expresidente de la Conferencia de Seguridad de Múnich, Wolfgang Ischinger.
En sus declaraciones a medios alemanes, el experto en seguridad calificó de «buena decisión» el aumento pactado en defensa de hasta el 5 % del PIB dentro de la OTAN, explicando que no se trata de «contentar» al mandatario estadounidense, Donald Trump, sino de una necesidad para la seguridad europea.
En este contexto, calificó de «irresponsable» el hecho de que 450 millones de europeos «no cuiden su propia seguridad» e hizo hincapié en la gran dependencia de la Unión Europea del país norteamericano. «Estaríamos completamente indefensos y desamparados. Carecemos de nuestro propio sistema de reconocimiento satelital. No tenemos defensa aérea. Estaríamos a merced de cualquier atacante», explicó Ischinger. «Esa es la cruda realidad después de más de 30 años de descuidar nuestras propias capacidades de defensa», agregó.
En paralelo, insistió en que Alemania y los demás Estados miembros de la OTAN deben hacer todo lo posible para reducir sistemáticamente, en los próximos años, su dependencia unilateral de EE.UU., para que Europa sea capaz de defenderse por su propia cuenta.
El pasado miércoles, los 32 países miembros de la OTAN pactaron durante la cumbre que celebran en La Haya el aumento del gasto en Defensa hasta alcanzar el 5 % del PIB de cada Estado para el año 2035. De este modo, los miembros cumplen con la exigencia expresada de manera reiterada por el presidente de EE.UU., Donald Trump, desde su llegada a la Casa Blanca. El republicano insiste en que todos los miembros de la Alianza incrementen sustancialmente sus inversiones en seguridad y defensa.
La declaración final recoge ese umbral final de gasto, si bien incluye una expresión genérica, que permite al presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, contar con la excepción acordada con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte.
No obstante, Bloomberg reportó que, si bien los líderes europeos intentan impulsar su propia industria defensiva, aún no hay una alternativa realista para las armas estadounidenses en un momento en que la OTAN incrementa el gasto en defensa.