El canciller húngaro, Peter Szijjarto, dijo que en esta ocasión en la cumbre de la OTAN se abordará el fortalecimiento de la alianza en lugar de intensificar «el apoyo a Ucrania».
El ministro de Asuntos Exteriores de Hungría, Peter Szijjarto, indicó este martes que se ha evitado un enfrentamiento entre Rusia y la OTAN, ya que el asunto de la adhesión de Ucrania no será tratado en la reunión anual de líderes de la organización militar, que empezó este martes en la ciudad neerlandesa de La Haya.
«La próxima cumbre de la OTAN es la primera desde 2022 cuyo enfoque no es intensificar el apoyo a Ucrania, sino fortalecer la alianza y la defensa colectiva», señaló Szijjarto, quien recalcó que, «al excluirse la membresía de Ucrania en la OTAN de la agenda, se ha evitado la confrontación directa con Rusia«. «Ha prevalecido la racionalidad», concluyó.
En ese mismo contexto, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, explicó las posibles consecuencias de la admisión del régimen de Kiev a la organización militar. «La adhesión de Ucrania a la OTAN supondría una guerra inmediata con Rusia y nos arriesgaríamos al estallido de una Tercera Guerra Mundial«, precisó Orbán, enfatizando que, por ende, «Ucrania no debería ser admitida ni en la OTAN ni en la Unión Europea».
Asimismo, afirmó que «es fundamental para la seguridad de Hungría no formar parte de un marco de integración común con Ucrania». Orbán sugirió que, en cambio, a Kiev podría ofrecérsele «una forma de cooperación» para concluir el conflicto con Moscú, en lugar de alentarle con «sueños ilusorios de integración».
Ucrania no figura en la cumbre de la OTAN
De acuerdo con The New York Times, a diferencia de las últimas tres cumbres de líderes de la OTAN, el asunto de Ucrania no será relevante en la reunión de este año, puesto que el suministro de armas a Kiev por parte de los países de la alianza será más restringido y las promesas anteriores de una futura adhesión quedarán fuera del programa.