El presidente estadounidense reiteró previamente que las instalaciones nucleares iraníes que atacó la aviación militar de su país quedaron «totalmente destruidas».
«¡Irán nunca reconstruirá sus instalaciones nucleares!«, prometió este martes el presidente de EE.UU., Donald Trump.
Sus declaraciones se producen después de que EE.UU. se uniera la semana pasada a Israel en su ofensiva contra Irán y lanzara ataques contra tres instalaciones nucleares: Natanz, Isfahán y Fordo.
Este lunes, el inquilino de la Casa Blanca reiteró que los sitios nucleares atacados quedaron «totalmente destruidos».
¿Qué dicen Irán y el OIEA?
Por su parte, el Centro Nacional de Seguridad Nuclear de Irán informó que «tras el criminal ataque estadounidense a los sitios nucleares de Fordo, Natanz e Isfahán, que son contrarios al derecho internacional», se llevaron a cabo «las investigaciones necesarias sobre la posibilidad de propagar contaminación nuclear alrededor de los sitios». Tras las pesquisas, aseguraron, no se registraron signos de contaminación por las medidas tomadas previamente. De igual modo, se descartó la existencia de amenazas para las personas que viven alrededor de las plantas atacadas.
La agencia estatal IRNA divulgó un video desde la planta de Fordo en interés de demostrar que las instalaciones no habían sufrido mayores afectaciones tras los bombardeos estadounidenses. «Parece que no hubo ningún ataque», aseveró un reportero del medio.
Mientras, el director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, informó a la Junta de Gobernadores de la organización que se identificaron cráteres en el sitio de Fordo, principal centro de enriquecimiento de uranio al 60 % en Irán, aparentemente provocados por municiones geotérmicas. Empero, el funcionario matizó que todavía no ha sido posible evaluar completamente la magnitud de los daños subterráneos.