Según el presidente, los ataques estadounidenses lograron llegar por debajo del nivel del suelo.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, aseveró este domingo que las tres instalaciones nucleares iraníes atacadas el sábado sufrieron daños «monumentales» y fueron destruidas.
En una publicación en su cuenta de Truth Social, el mandatario dijo que la «obliteración» es un «término exacto» para describir los daños registrados en los tres sitios nucleares atacados. «Se produjeron daños monumentales en todas las instalaciones nucleares de Irán, como muestran las imágenes de satélite. ¡Obliteración es un término exacto!», afirmó el líder estadounidense.
«La estructura blanca que se muestra está profundamente incrustada en la roca, incluso su techo está muy por debajo del nivel del suelo, y está completamente protegida contra el fuego», agregó. «Los mayores daños se produjeron a gran profundidad bajo tierra. ¡Justo en el blanco!», declaró.
Previamente, Trump ya sugirió que los daños causados a las tres instalaciones nucleares iraníes son «monumentales», ya que los impactos, según sus palabras, fueron «duros y precisos».
Ataque estadounidense
- Trump anunció la noche del sábado que la Fuerza Aérea del país norteamericano había completado un «exitoso ataque» contra tres instalaciones nucleares en Irán: Fordo, Natanz e Isfahán.
- El ministro de Asuntos Exteriores iraní, Seyed Abbas Araghchi, recordó que «de conformidad con la Carta de la ONU y sus disposiciones, Irán se reserva todas las opciones para defender su soberanía, intereses y pueblo».
- Mientras, el jefe de Estado de EE.UU. advirtió a Teherán que en caso de una posible represalia empleará «una fuerza mucho mayor de la que se presentó esta noche».
- Desde el Ministerio de Exteriores ruso advirtieron que «el riesgo de una escalada del conflicto en Oriente Medio, ya sumido en múltiples crisis, ha aumentado significativamente».
- A su vez, el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, enfatizó que, con su ofensiva, el país norteamericano confirma que «para preservar su hegemonía en el mundo está dispuesto a cometer cualquier crimen y a violar el derecho internacional», así como subrayó que «nadie ha autorizado» a Washington emprender tales acciones.