«Él cree que no hay muchas opciones», declaró una fuente consultada sobre el tema.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, estaría considerando atacar la planta iraní de enriquecimiento de uranio de Fordo, en Irán, revelaron fuentes a CBS.
Según el reporte, tras un análisis de ventajas y desventajas, el mandatario estadounidense «cree que no hay más opciones» que arremeter contra la planta más resguardada de la nación persa, porque considera que hay riesgo de que se produzcan armas en un período relativamente corto.
«Terminar el trabajo significa destruir a Fordo«, añadió la fuente consultada al respecto. Aparentemente, Trump sopesa involucrarse de manera directa en el conflicto con Irán, pero aún no ha determinado cuál será alcance de esa intervención, aseguraron desde el Departamento de Defensa a CBS News.
El mandatario republicano baraja ese escenario en medio de la escalada del conflicto en Oriente Medio, luego de que Israel decidiera atacar a Irán el pasado 13 de junio, lo que ha desatado la respuesta de Teherán. Sin embargo, hasta ahora Tel Aviv no ha tenido la planta de Fordo entre sus objetivos conocidos.
Dos cartas sobre la mesa
Los reportes indican que Trump está dispuesto a proceder para eliminar el sitio, pero la decisión aún no está tomada. Los voceros consulados por CBS afirman que la estrategia que se evalúa contempla el uso de bombas para destruir búnkeres, aunque no está claro cuánto tiempo y logística llevaría organizar un ataque de esa magnitud.
Esta semana, reportes de prensa aseguraron que Washington podría ayudar al país hebreo a destruir la instalación de enriquecimiento de uranio, colocada profundamente bajo la tierra en la localidad de Fordo, con el uso de la mayor arma antibúnker del arsenal estadounidense GBU-57, apodado también como ‘padre de todas las bombas’.
Otra opción de Washington sería pactar con Irán para que sean las propias autoridades del país persa las que procedan a deshabilitar la fábrica.