Detrás de la puerta de un dormitorio o sala común en Israel, se esconden paredes de hormigón y acero diseñadas para salvar vidas.
En Israel, una característica arquitectónica común une a la mayoría de los hogares: la presencia de una habitación fortificada especial conocida como ‘mamad’ (habitación protegida).
Esta realidad, aunque es el resultado de décadas de necesidad de protegerse, se ha vuelto fundamental tras las recientes escaladas del conflicto en Oriente Medio, cuando las sirenas antiaéreas pueden sonar en cualquier momento, dando apenas unos 60 segundos para buscar protección segura.
Evolución: de refugios públicos al ‘mamad’ privado
La historia de estos espacios es clave. Inicialmente Israel dependía de refugios comunales públicos instalados a cada pocas manzanas, en calles y barrios durante los primeros años del Estado israelí. Aunque contaban con servicios básicos, su acceso durante las alertas era difícil y su uso compartido, complejo. Muchos acabaron como almacenes, estudios o sinagogas.
La dificultad de correr unas cuantas manzanas con niños pequeños llevó a una revisión normativa (1972-1992), exigiendo un refugio público por edificio. Sin embargo, los problemas de acceso por uso indebido persistieron.
La respuesta fue la ley de 1992 del Mando de Frente Interno, que hizo obligatorio incluir un ‘mamad’ privado dentro de cada nueva vivienda (apartamento o casa) y espacio comunitario o institucional. Esta solución garantizó un acceso inmediato y eliminó la dependencia de espacios compartidos.
Normalidad cotidiana con ingeniería oculta
Estas habitaciones encarnan una doble función esencial. En tiempos de calma, se integran sin esfuerzo en la vida del hogar. Sirven comúnmente como dormitorios (especialmente infantiles o de invitados), salas de estar, estudios o cuartos de almacenaje, con un aspecto deliberadamente ordinario.
Tras esta fachada de normalidad se oculta una ingeniería de supervivencia:
- Paredes de hormigón reforzado, significativamente más gruesas que las estándar.
- Una puerta blindada de acero con múltiples cerraduras reforzadas.
- Ventanas con vidrio antibalas y pesados postigos metálicos que sellan herméticamente el espacio ante una explosión.
Este diseño tiene un propósito claro: brindar protección inmediata durante ataques con cohetes, salvando vidas en los minutos críticos del impacto.
Límites y eficacia
Es crucial entender que no son refugios para estancias prolongadas: carecen de servicios básicos como baño, agua o cocina, al estar diseñadas exclusivamente para emergencias de minutos. Sin embargo, su eficacia protectora quedó demostrada durante el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023, salvando vidas al impedir físicamente la entrada de los atacantes en numerosos hogares.
