El magnate y el secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, estuvieron involucrados en una pelea física, que contribuyó a la reciente ruptura entre el empresario y el mandatario, según contó Steve Bannon.
Han salido a la luz nuevos detalles sobre la pelea física que habrían protagonizado Elon Musk y el secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, a mediados de abril en la Casa Blanca, un momento visto como un punto de inflexión clave que contribuyó a la reciente ruptura entre el empresario y el presidente Donald Trump.
Según las declaraciones del exasesor de Trump Steve Bannon a The Washington Post, Bessent y Musk, tras salir del Despacho Oval luego de una polémica reunión en la que ambos presionaron al mandatario sobre quién debía dirigir el Servicio de Impuestos Internos (IRS), comenzaron a intercambiar insultos mientras caminaban por el pasillo.
Supuestamente, Bessent criticó a Musk por su promesa incumplida de recortar el gasto presupuestario estadounidense en un billón de dólares gracias al Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), y calificó al magnate de ser un «fraude total«.
Tras estos comentarios, el dueño Tesla y SpaceX habría llevado el altercado verbal a una pelea física en la que golpeó con el hombro el pecho de Bessent «como un jugador de rugby». Este, según Bannon, respondió con un golpe y al llegar al despacho del entonces asesor de Seguridad Nacional, Mike Waltz, varias personas intervinieron para poner fin a la pelea.
El altercado terminó con Musk siendo escoltado fuera del Ala Oeste. «El presidente Trump se enteró y dijo: ‘Esto es demasiado’«, afirmó Bannon.
Según el medio, las tensiones entre Musk y Trump estuvieron latentes durante algún tiempo, pero los desacuerdos estallaron a la vista pública esta semana tras un intercambio de ataques en redes sociales.
