La vocera de la Cancillería rusa acusó al régimen de Volodímir Zelenski de perpetrar un genocidio contra su propio pueblo.
La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova, ha declarado este sábado en comentarios al canal ruso Zvezdá que «el régimen de Kiev no necesita a sus ciudadanos, ni vivos ni muertos».
«No hay nación ni etnia en el mundo que se niegue a dar sepultura a sus guerreros. Pero ahí está el régimen de Kiev, que profesa una ideología misántropa y comete genocidio contra su propio pueblo«, afirmó la vocera de la Cancillería rusa, pronunciándose respecto a la negativa de la parte ucraniana a recoger los cuerpos de sus militares muertos entregados por Rusia.
El líder de la delegación rusa, Vladímir Medinski, anunció la llegada a la zona de intercambio del primer lote de cuerpos congelados de 1.212 soldados ucranianos de los 6.000 que Moscú prometió devolver a modo de gesto humanitario «para que sus familias puedan darles una sepultura humana».
Sin embargo, la parte ucraniana no llegó al lugar e «inesperadamente aplazó tanto la recepción de los cadáveres como el intercambio de rehenes de forma indefinida», lamentó Medinski.
Rusia también ha entregado al régimen de Vladímir Zelenski la primera lista de 640 prisioneros de guerra heridos y enfermos de gravedad, así como presos menores de 25 años para iniciar el intercambio. «Que 1.200 soldados y oficiales de cada lado tengan la oportunidad de volver a casa, tal y como lo acordamos», subrayó Medinski, instando a que Kiev cumpla con lo acordado en Estambul.