En otoño del año pasado, Serguéi Stokoz abrió fuego contra militares y civiles.
La Justicia rusa ha condenado a 16 años de prisión al soldado ucraniano Serguéi Stokoz tras ser declarado culpable de cometer un ataque terrorista en la provincia de Kursk, comunicó este jueves el Comité de Investigación de Rusia.
Stokoz era un soldado de alto rango encargado de lanzagranadas en la unidad militar A-3283 de la 17.ª brigada de tanques. Irrumpió en territorio ruso ilegalmente junto con fuerzas ucranianas el 18 de septiembre de 2024 «con el fin de cometer un atentado terrorista». Iba armado con un fusil de asalto AKS-74U y granadas F-1.
«El mismo día, Stokoz estableció una posición de observación y tiro cerca de la aldea de Pogrebkí, en el distrito de Sudzha de la provincia de Kursk, desde donde abrió fuego contra militares y civiles rusos«, indica el Comité de Investigación.
Fue tomado prisionero el 1 de noviembre durante los combates contra fuerzas rusas, que lo entregaron a los organismos de investigación. El tribunal dictaminó que los primeros tres años de su condena los cumplirá en una cárcel ordinaria y el resto de la sentencia en un centro penitenciario de máxima seguridad.