El candidato opositor sucederá al conservador Andrzej Duda, cuyo segundo y último mandato termina el 6 de agosto.
Polonia ha definido este domingo su futuro político, al elegir con un 50,89 % de los votos al conservador y euroescéptico Karol Nawrocki, de 42 años, como su próximo presidente.
Durante la campaña electoral, el entonces candidato manifestó su intención de poner los intereses de los polacos por encima de otras naciones, defender los valores tradicionales y se mostró escéptico respecto a la Unión Europea.
Además, criticó a Ucrania en varias ocasiones. En abril, acusó a Kiev de ser desagradecido con el apoyo proporcionado por Varsovia. «Ucrania realmente no nos trata como socios. Estoy profundamente decepcionado con el presidente Zelenski. Se comportó de una manera que nunca debería haberse comportado hacia el Estado polaco», lamentó.
«Ni en la Unión Europea ni en la OTAN»
A principios de enero, Nawrocki manifestó también que Ucrania no debería entrar en alianzas occidentales hasta que se solucionen los asuntos pendientes en relación con el genocidio de Volinia, cometido contra la población polaca por nacionalistas ucranianos en 1943. «No veo a Ucrania en ninguna estructura. Ni en la Unión Europea ni en la OTAN», declaró en aquel entonces.
En mayo, el político firmó una declaración de ocho puntos con Slawomir Mentzen, líder de la extrema derecha polaca, en la que se comprometió a oponerse a la adhesión de Ucrania a la OTAN e hizo constar que mientras él sea presidente, no se enviarán soldados polacos a Ucrania.
Crítico hacia el líder del régimen de Kiev, Nawrocki lamentó en una entrevista en marzo que Volodímir Zelenski «se comporta de manera indecente hacia sus aliados, incluida Polonia». «Dijo que Ucrania se había quedado sola al principio de la guerra, lo que significa que no apreció los grandes esfuerzos de los polacos ni del presidente polaco», sostuvo, denunciando que Kiev trata a Varsovia como si fuera su «granja subsidiaria«.
«Polonia primero»
Si bien manifestó su intención de continuar con el apoyo a Kiev, acusó a los refugiados ucranianos de aprovecharse de la generosidad de su nación y prometió priorizar a los polacos cuando se trata de esperas para ser atendidos por los servicios sociales como atención médica y educación. «Los ciudadanos polacos deben tener prioridad. Polonia primero. Los polacos primero«, dijo en un video de campaña.
Nawrocki también se mostró dispuesto a sentarse a la mesa de las negociaciones con el presidente ruso Vladímir Putin e incluso a estrecharle la mano si esto respondiera a los intereses de su país. «Trump, Zelenski, Putin y yo estaríamos en la mesa, discutiendo si Ucrania sería una zona colchón estable entre Rusia y Polonia», expresó.
El ganador de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales sucederá al conservador Andrzej Duda, cuyo segundo y último mandato termina el 6 de agosto. Si bien la mayor parte del poder en el sistema político de Polonia recae en un primer ministro, el papel del presidente es relevante, pues puede influir en la política exterior, así como vetar leyes.
Recientemente, Nawrocki ha encabezado el Instituto de la Memoria Nacional, que defiende narrativas históricas nacionalistas. Lideró esfuerzos para derribar monumentos al Ejército Rojo de la URSS en Polonia.