El secretario de Comercio estadounidense advirtió de que la economía china enfrentaría una «situación realmente difícil» si Washington les cierra el acceso a su mercado, del que dependen como consumidor clave de sus productos.
China está demorando deliberadamente la firma de un acuerdo comercial con Estados Unidos, afirmó el secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, en una entrevista con Fox News. Asimismo, advirtió de las graves consecuencias económicas que Pekín sufriría si Washington decidiera cerrar sus mercados a sus productos.
«Lo que ocurrió es que el secretario [del Tesoro de Estados Unidos, Scott] Bessent y el embajador [Jamieson] Greer fueron a Ginebra, llegaron a un acuerdo con los chinos y, lo más acertado sería decir que simplemente están retrasando el acuerdo«, aclaró Lutnick en referencia a las recientes gestiones.
El secretario reveló que la Administración estadounidense ya está tomando medidas de presión concretas contra Pekín. «Estamos tomando ciertas acciones para mostrarles cómo se siente estar al otro lado de esta ecuación», declaró, aunque sin detallar la naturaleza específica de dichas acciones. En este contexto, Lutnick subrayó la plena confianza en el liderazgo del presidente Donald Trump, afirmando que «sabe lo que hay que hacer».
Lutnick recalcó que Estados Unidos es consumidor de productos chinos, enfatizando que si Washington no abre sus mercados, la economía china caería en una «situación realmente difícil».
La encrucijada de julio
Al abordar la tregua de 90 días que expira en julio, Lutnick evitó confirmar cualquier prórroga. Enfatizó que, si bien se están preparando «muchos» acuerdos, la Administración prioriza mejorarlos continuamente para alcanzar términos más favorables.
«Por lo tanto, no creo hoy que se vaya a producir una prórroga», concluyó, sentenciando que «si logran un acuerdo, el presidente Trump decidirá qué acuerdo habrá».
Estas declaraciones se producen en el marco de la frágil tregua arancelaria de 90 días que fue acordada en Ginebra para facilitar negociaciones comerciales que, según el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, se han estancado últimamente.
A este escenario se suman otras crecientes tensiones entre ambas potencias, agravadas por los esfuerzos de EE.UU. por frenar el avance tecnológico chino y las restricciones contra Pekín en la exportación de minerales críticos.