La construcción del gasoducto contó con masivas inversiones alemanas, mientras la economía del país lucha por lograr estabilidad sin el gas ruso barato.
El canciller alemán, Friedrich Merz, afirmó este miércoles que hará todo lo posible para que el gasoducto Nord Stream 2 no comience a funcionar.
«Seguiremos aumentando la presión sobre Rusia», declaró Merz en una rueda de prensa celebrada en Berlín. «Haremos todo lo posible en este contexto para garantizar que el Nord Stream 2 no pueda volver a operar«, indicó.
El 26 de septiembre de 2022, los gasoductos Nord Stream 1 y 2 se vieron afectados por potentes explosiones en aguas de las zonas económicas exclusivas de Suecia y Dinamarca, tras lo cual se detectaron fugas de gas en el mar. Las autoridades de varios países atribuyeron lo ocurrido a un posible acto de sabotaje.
El carácter premeditado de las explosiones se confirmó durante las evaluaciones posteriores. Una bomba dejada por los perpetradores junto a las tuberías no detonó. El partido AfD aboga por el levantamiento inmediato de las sanciones contra Rusia y el relanzamiento de los gasoductos Nord Stream.
A finales de marzo, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, recalcó que la idea de restablecer el interrumpido suministro de energía de Rusia a Europa no es solo en interés de EE.UU. y la nación euroasiática, sino también de los países europeos. Asimismo, tildó de «locos o suicidas» a los que se oponen a esta medida. «Al mismo tiempo, personas como Robert Habeck [exvicecanciller de Alemania], Ursula von der Leyen y Boris Pistorius [el ministro de Defensa de Alemania], dicen que nunca permitirán que se restablezcan los Nord Stream. Son personas locas o suicidas«, sostuvo Lavrov.