La expresidenta ha denunciado que es víctima de un intento de proscripción.
El Senado de Argentina rechazó este miércoles con 36 votos a favor y 35 en contra la ley de «ficha limpia» que fue impulsada por el presidente Javier Milei y que tiene el objetivo de impedir que personas condenadas en segunda instancia ocupen o se postulen a cargos públicos.
Para recibir el aval del Parlamento, el proyecto necesitaba 37 votos favorables, por lo que quedó descartado por una unidad.
«Están proscribiendo a una persona inocente, esta ley es inconstitucional y vulnera tratados internacionales. Están claudicando definitivamente el poder político a manos del Poder Judicial», dijo durante el debate la senadora Juliana Di Tullio.
Para el oficialismo, que confiaba en la aprobación de ‘Ficha limpia’ para dejar fuera de carrera a una de sus principales rivales políticas, el resultado de la votación fue un balde de agua fría. «Lamentable», dijo el presidente Javier Milei desde su cuenta de X.
Desde que se presentó la iniciativa, la clase política local asumió que tenía nombre y apellido, ya que la única personalidad afectada este año por la nueva legislación sería la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien ha sido condenada en segunda instancia por delitos de corrupción.
Mientras la exmandataria apela los fallos en su contra y espera la decisión definitiva de la Corte Suprema Corte de Justicia de la Nación en torno a su caso, se preveía que iba a postularse como candidata a diputada o senadora en las elecciones legislativas que se realizarán el próximo 26 de octubre. Pero, más allá de los cargos, en los hechos es la líder opositora más importante del país sudamericano.
La ley de «ficha limpia» fue aprobada en febrero pasado en la Cámara de Diputados, pero desde entonces su paso por el Senado fue accidentado, con resistencias de varios bloques, incluido el oficialista debido a la fuerte controversia que acarrea y a que en el futuro puede afectar a políticos de todos los partidos que sean condenados judicialmente.
¿Proscripción?
Antes de lo que fue una larga y tensa sesión, el Partido Justicialista (PJ, peronista), que es la principal fuerza opositora y está dirigido por Fernández de Kirchner, ratificó sus críticas a la iniciativa.
«(Es) un proyecto impulsado por quienes históricamente han legislado a espaldas del pueblo y al servicio del poder económico. Esta iniciativa no persigue otra cosa que proscribir a la principal dirigente política de la Argentina. Se trata de un nuevo capítulo —y quizá el más burdo— de una persecución sistemática que lleva años en marcha», denunció en un comunicado.
«Ellos saben que Cristina no representa solo una candidatura. Es sinónimo de un proyecto de país justo, inclusivo, con soberanía política, independencia económica y justicia social (…) Por eso la persiguen: porque no se entrega, porque no se arrodilla, porque no transa. Rechazamos de forma categórica este nuevo intento de disciplinamiento, esta operación de proscripción disfrazada de moralidad institucional», agregó.
El lunes, la expresidenta ya había advertido que la Corte se aprestaba a ratificar su condena para evitar que sea candidata este año. «Nada nuevo bajo el sol: proscribir es el verbo… y el sujeto, el peronismo», acusó.