Así lo afirmó Dmitri Peskov al comentar el reconocimiento del partido opositor alemán AfD como organización «extremista de derecha».
Europa impone restricciones contra aquellos que no se concuerdan con la corriente dominante, declaró el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, al comentar el reconocimiento del partido opositor alemán Alternativa para Alemania (AfD) como organización «extremista de derecha».
«El propio panorama político europeo está plagado de diversas medidas restrictivas contra aquellas fuerzas políticas e individuos que no encajan con sus creencias en la corriente dominante«, señaló el vocero.
No obstante, aclaró que Moscú no pretende interferir en la situación. «Es un asunto interno alemán y no tenemos derecho ni intención de interferir en él», aseveró.
Peskov también respondió si Rusia está dispuesta a colaborar con las nuevas autoridades alemanas, que serán encabezadas por el conservador Friedrich Merz.
«Aquí nos fijaremos sin duda en los hechos y en las palabras, pero sobre todo en la actuación del próximo canciller. Hasta ahora hemos escuchado varias declaraciones suyas. Estas declaraciones no han señalado su voluntad y disposición para avanzar hacia la normalización de las relaciones bilaterales», indicó.
«El presidente [Vladímir] Putin siempre repite una tesis fundamental: estamos abiertos a unas relaciones mutuamente beneficiosas y respetuosas con todos los países», concluyó el portavoz.
¿Qué pasó?
La semana pasada, la Oficina Federal para la Protección de la Constitución de Alemania, que realiza tareas de contrainteligencia, catalogó a la AfD como organización «extremista», causando una amplia gama de críticas tanto en el país como en el extranjero.
Según el organismo, el partido «desprecia la dignidad humana«, «agita» contra los refugiados y migrantes, así como «no considera a los ciudadanos alemanes con un historial de inmigración desde países musulmanes, por ejemplo, como miembros iguales del pueblo alemán».
«Сonsideran extremistas a los que tienen ‘ratings’ más altos»
Al comentar la noticia, el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia y exmandatario del país, Dmitri Medvédev, declaró que «una organización extremista» son «palabras fuertes contra un partido parlamentario«.
«Al parecer, la CDU/CSU [la Unión Demócrata Cristiana], el SPD [el Partido Socialdemócrata de Alemania] y otras trivialidades de los partidos alemanes consideran extremistas a los que tienen ‘ratings’ más altos», sostuvo.
El vicepresidente de Estados Unidos, James David Vance, comparó lo que está ocurriendo en Alemania con la reconstrucción del Muro de Berlín. «La AfD es el partido más popular de Alemania y, con diferencia, el más representativo del este de Alemania. Ahora los burócratas intentan destruirlo», escribió Vance en sus redes sociales.
«Occidente unido derribó el Muro de Berlín. Y ha sido reconstruido, no por los soviéticos o los rusos, sino por el ‘establishment’ alemán», añadió.