El bloque sudamericano se reunió este viernes en Buenos Aires ante una «coyuntura internacional «desafiante» por los cambios en el comercio internacional.
El Mercado Común del Sur (Mercosur) definió este viernes ampliar la lista de productos exceptuados de aranceles a fin de afrontar la crisis desatada en el comercio exterior a raíz de las medidas del presidente estadounidense Donald Trump.
Los ministros de Relaciones Exteriores de los países miembro del bloque se reunieron en el Palacio San Martín de Buenos Aires, sede de la Cancillería argentina.
En un comunicado, los cancilleres destacaron «el consenso alcanzado» sobre la necesidad de «ampliar temporariamente» la lista nacional de excepciones al Arancel Externo Común (AEC) de 100 a 150 productos.
El AEC es la tasa que pagan los países que quieren ingresar sus productos a las naciones del bloque: Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Bolivia. El tributo va del 0 % al 35 %, dependiendo del rubro.
Por otra parte, los representantes de las 5 naciones que integran el Mercosur coincidieron también en «priorizar e impulsar negociaciones externas con países comercialmente relevantes para todos los socios durante el segundo semestre del corriente año».
Suavizar y negociar
La decisión sobre la flexibilización arancelaria se terminó de sellar en el marco del segundo encuentro realizado en menos de un mes en la Cancillería argentina.
Fuentes de Relaciones Exteriores de Argentina señalaron a La Nación que la ampliación de la lista de productos exceptuados, de 100 a 150, permitirá al bloque regional negociar con mayor libertad con EE.UU. y suavizar la suba de 10 puntos en los aranceles que Trump impuso a los países sudamericanos.
Asistieron al encuentro el canciller argentino Gerardo Werthein, y sus pares de Brasil, Mauro Vieira; de Bolivia, Celinda Sosa Lunda; de Uruguay, Mario Lubetkin y de Paraguay, Rubén Ramírez.
En paralelo, también figuran las negociaciones del posible acuerdo del Mercosur con la Unión Europea (UE), cuya ratificación se ha vuelto prioritaria en medio de la incertidumbre desatada por la guerra comercial de EE.UU. Los líderes diplomáticos reiteraron la importancia de los «recientes avances» respecto a la conclusión del convenio con la UE.