Los presos en Francia podrían ser obligados a pagar por su tiempo en la cárcel como parte de un esfuerzo más amplio para hacer frente a la creciente violencia en todo el país, dijo este lunes el ministro de Justicia, Gérald Darmanin, en declaraciones a la prensa local.
Según Darmanin, el gasto penitenciario del país alcanza los 4.000 millones de euros anuales. «No se trata de hacer pagar a los presos los 4.000 millones, evidentemente, sino de una contribución a los costes, al servicio público de la justicia», aclaró. «Deben seguir trabajando en prisión y pagar lo que deben a las víctimas. Pero una contribución a los costes, al servicio público de la justicia, me parece una buena medida», explicó.
La iniciativa se da a conocer tras una ola de incidentes violentos contra centros penitenciarios y guardias carcelarios en toda Francia a principios de este mes. Según el entorno del ministro, las personas indigentes y en prisión preventiva no se verán afectadas por esta medida.