París, 29 abr. La Asamblea Nacional de Francia votará hoy un proyecto de ley dirigido a fortalecer el enfrentamiento al narcotráfico, iniciativa defendida por el gobierno que ya fue adoptada en el Senado.
La víspera, la cámara alta aprobó por unanimidad el texto promovido por senadores conservadores y socialistas bajo el rótulo de liberar al país del flagelo del narcotráfico, un fenómeno que preocupa a la ciudadanía por su impacto en barrios y ciudades, sobre todo por la violencia que genera y sus consecuencias en la juventud.
Para el ministro del Interior, Bruno Retailleau, una vez en vigor, esta ley inquietará a los delincuentes y representará un antes y un después en el combate a las drogas.
Entre las medidas recogidas en el proyecto, validado previamente por una comisión bicameral, destacan la creación de una Fiscalía especializada en perseguir al crimen organizado y el endurecimiento del régimen carcelario de grandes capos, en aras de evitar que sigan delinquiendo tras las rejas.
También resalta la reducción de penas para los “arrepentidos”, condenados que decidan colaborar con la justicia para esclarecer hechos, propuesta tomada de la experiencia italiana en la lucha antimafia.
La norma no está exenta de la polémica, como el artículo que recoge la posibilidad de no revelar determinada información a los narcotraficantes y sus abogados durante las pesquisas, lo cual sectores de la izquierda y juristas denuncian al argumentar una violación del debido proceso.
Sin embargo, el gobierno insiste en la importancia de esta ley frente a la urgencia provocada por el tema de las drogas, al punto de que el ministro de Justicia, Gérald Darmanin, afirmó que Francia no es un narcoestado, pero lidia con signos del mismo, en particular el debilitamiento del poder público.
Vemos países que caen ante el poder alcanzado por los narcobandidos, quienes amenazan a autoridades y asesinan a periodistas, no estamos en ese caso, pero tampoco estamos lejos, advirtió hace unos días Darmanin en la cadena Europa 1.
Se espera que la Asamblea Nacional adopte el proyecto de ley, aunque no de manera unánime en el hemiciclo, con partidos de izquierda que podrían oponerse, entre ellos La Francia Insumisa.