Boris Pistorius aseguró que aunque EE.UU. cese completamente su apoyo a Kiev, Berlín seguirá ayudando al régimen de Kiev.
Las concesiones territoriales que el presidente estadounidense, Donald Trump, exige a Kiev en su plan para la resolución del conflicto ruso-ucraniano son demasiadas, según opinó el ministro de Defensa de Alemania, Boris Pistorius.
«Por supuesto, Ucrania sabe desde hace tiempo que un acuerdo de alto el fuego o un tratado de paz sostenibles y dignos de confianza pueden conducir o conducirán a la cesión de territorio. Pero desde luego [los ucranianos] no llegarán tan lejos, o no deben llegar tan lejos, como la última propuesta del presidente estadounidense. Porque […] Ucrania podría haberlo hecho por sí sola, hace un año, mediante la capitulación, por así decirlo», declaró en un programa de televisión.
Cuando le preguntaron sobre el alcance de las concesiones aceptables, dijo que no las ataría a límites territoriales antes de aceptar que, en última instancia, deberían ser proporcionales a «las garantías de seguridad que se dan«.
Pistorius aseguró que aunque Washington cese completamente su apoyo a Kiev, Berlín seguirá ayudando al país eslavo, algo que quedó claro en el acuerdo de la coalición de aliados de Ucrania, puesto que, según el político, si Ucrania cayera, Rusia amenazaría a los países de la OTAN. «No se trata solo de solidaridad con Ucrania, sino de nuestra seguridad y nuestra paz en Europa», manifestó.
- En junio de 2024, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, reiteró que su país no tiene ninguna intención de atacar a la OTAN. «Se inventaron que Rusia quiere atacar a la OTAN. ¿Están locos? ¿Son tontos como una piedra? ¿Quién inventó eso? ¡Es una basura y una tontería!», declaró el mandatario en ese entonces.
- Según Putin, los políticos europeos en realidad intentan intimidar a su pueblo con la presunta amenaza rusa para mantener «su propia posición imperial y su grandeza».
- Por otra parte, ha declarado en repetidas ocasiones que para poner fin al conflicto ucraniano hay que elaborar una solución pacífica que garantice la seguridad de Rusia a largo plazo y elimine las causas profundas del conflicto.