El canciller ruso afirmó que «no hay nada de malo en que Estados Unidos y Rusia tengan buenas relaciones».
El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, elogió la postura de la Administración estadounidense de Donald Trump de no permitir que las diferencias de intereses entre los dos Estados «degeneren en confrontación».
Cuando se le preguntó en el foro diplomático en Antalya este sábado cómo tratar con el nuevo presidente de Estados Unidos, Lavrov respondió: «No hay nada de malo en que Estados Unidos y Rusia tengan buenas relaciones. Y lo que sucede entre nosotros y la Administración Trump es algo muy banal: los países se hablan entre sí sin dictarse [qué hacer] el uno al otro».
«Tuve algunos contactos con los miembros de la Administración de Washington y me gustó el mensaje que transmitían», inició. Lavrov detalló que sus interlocutores le habían dicho que «la política exterior de EE.UU. se basa en los intereses nacionales de EE.UU.». «Al mismo tiempo, EE.UU. reconoce que otros países también tienen sus intereses nacionales«, expresó Lavrov, afirmando que «esos intereses nunca coincidirán plenamente». «Cuando esos intereses se contradicen es responsabilidad y deber de los países, especialmente de las grandes potencias, no permitir que esas diferencias degeneren en confrontación«, señaló.
El canciller ruso recordó que el equipo del exlíder estadounidense Joe Biden calificó a Rusia de «amenaza intermedia» y a China como el «mayor desafío a largo plazo». «China y Estados Unidos intercambiaron declaraciones que no fueron muy agradables para ellos, incluso sobre Taiwán», enfatizó.
«A veces oímos desde Washington amenazas a Pekín: ‘Ni se te ocurra usar la fuerza, sería desastroso’. Así que intercambian esas ‘galanterías’ en público, pero nunca dejan de hablar el uno con el otro«, agregó. «Y de alguna manera la Administración Biden decidió que las cosas debían ser diferentes con Rusia. Que Rusia debía aprender una lección, y esa lección es el castigo», denunció el diplomático.
Lavrov agregó que esto es «por decirlo suavemente tonterías». «Lo que Trump ha propuesto es volver a la normalidad, detener este curso estúpido», manifestó. El ministro subrayó que la única solución al conflicto de Ucrania implica abordar sus causas profundas y que Trump lo entiende. «El presidente Trump fue el primero y hasta ahora, creo, casi el único entre los líderes occidentales que repetidamente y con convicción, varias veces, declaró que el gran error fue empujar a Ucrania a la OTAN», concluyó.