Los efectivos rusos contaron al equipo de RT los obstáculos que enfrentaron durante la liberación de las zonas ocupadas por el régimen de Kiev.
Continuando con la liberación de la provincia de Kursk, las Fuerzas Armadas de Rusia han recuperado el asentamiento de Svérdlikovo, situado cerca de la frontera con Ucrania. Este avance es un logro muy esperado tanto por los civiles como por los militares rusos.
El soldado de asalto ruso ‘Sayan’ compartió que uno de los principales desafíos fue el acceso al territorio enemigo, ya que estaban en riesgo de ser detectados por los drones ucranianos. «El movimiento de las tropas se produjo de noche, porque durante el día había mucho terreno abierto, era difícil superarlo», explica. Para evitar ser localizados por los drones nocturnos que tienen detectores de temperatura, los efectivos utilizaron una capa especial que retiene el calor corporal.
Entre ellos hay varios voluntarios que abandonaron sus trabajos para defender su país. Uno de ellos, ‘Siberia’, comandante del grupo, contó: «Vi lo que pasaba por la televisión y muchos de mis amigos se unieron a la operación militar especial. Yo también quise hacerlo. Yo trabajaba para la industria petrolera, era operador de instalaciones de proceso».
Al acercarse a la localidad recuperada, los soldados enemigos huyeron, dejando atrás armas, municiones y provisiones, lo que indica que su presencia en el área está disminuyendo. ‘Harry’, un soldado de asalto, relató que al llegar, sus compañeros comenzaron inmediatamente el ataque, sorprendiendo al enemigo, que estaba listo y atrincherado. «Pero los chicos los noquearon, por supuesto. Ahora ya están más debilitados», relata.
Las brigadas rusas se están preparando para nuevas misiones con el objetivo de expulsar completamente a las fuerzas ucranianas de la provincia.