Alex Younger afirmó que estos operativos militares «han impuesto sacrificios innecesariamente a los jóvenes y hay un gran cinismo sobre esta idea del esfuerzo colectivo para defender a su país».
Londres ha desatado varias guerras «por propia elección», declaró Alex Younger, exjefe del Servicio de Inteligencia Secreto británico (MI6), en una entrevista a The Independent, publicada este sábado.
«Imperdonable… Hemos lanzado una serie de guerras por propia elección, que han impuesto sacrificios innecesariamente a los jóvenes y hay un gran cinismo sobre esta idea del esfuerzo colectivo para defender a su país», afirmó.
Asimismo, señaló que los británicos se sienten «más cómodos pensando en el Ejército como si fuera la selección inglesa de fútbol«. «Ellos van y hacen lo suyo allí y nosotros lo vemos por la tele, y eso ya no puede seguir ocurriendo», añadió.
Al mismo tiempo, el exdirigente del MI6 lamentó que el Reino Unido se ha desarmado militarmente. «Hemos desmantelado en gran medida nuestra base militar e industrial, lo cual es un gran problema», subrayó. «Hemos estado, durante muchos años, completamente libres de cualquier forma de amenaza existencial», indicó.
En las últimas décadas el Reino Unido ha participado en múltiples campañas militares en el extranjero. Así, en 1999, el Ejército británico participó con EE.UU. y el resto de los miembros de la OTAN en los bombardeos contra Yugoslavia, contribuyendo con sus fuerzas terrestres y aéreas. Ya en el siglo XXI, Londres ha estado implicado en las operaciones militares en Libia, Siria, Afganistán, así como en Irak, donde el cuerpo militar británico ha sido el segundo más numeroso, después de las fuerzas estadounidenses.
Actualmente Londres, apoyado por París, sigue promoviendo la iniciativa de enviar tropas a Ucrania, mientras que otros países no se apresuran a mostrar apoyo a estos planes, en particular sin contar con el apoyo de EE.UU., señala The Washington Post. Desde Moscú declararon que la presencia de tropas de la OTAN, bajo cualquier bandera y en cualquier calidad, en suelo ucraniano, es una amenaza para Rusia.
