El Parlamento de Alemania desbloquea 3000 millones de euros en ayuda militar para Ucrania, tras el fracaso de la UE para dotar con 40 000 millones de euros a Kiev.
La comisión de presupuestos del Parlamento alemán (Bundestag) dio el viernes luz verde a la ayuda para Ucrania después de que se aprobase una reforma constitucional que permite al Estado germano endeudarse sin límite en materia de defensa, tal como esperaba el canciller entrante Friedrich Merz.
Esta ayuda estaba en suspenso desde hacía meses debido a las reticencias del canciller saliente Olaf Scholz, preocupado por la situación presupuestaria del país. Ahora, los 3000 millones de euros se suman a los 4000 millones de euros en ayuda militar a Ucrania ya previstos en el presupuesto para 2025.
Los fondos estarán destinados a suministrar equipos de defensa a Ucrania en su guerra contra las fuerzas rusas, incluidas municiones de artillería y sistemas de defensa antiaérea, según altos cargos del gobierno.
La aprobación de Berlín tuvo lugar después de que la cumbre de los líderes de la Unión Europea (UE) en Bruselas concluyó sin un acuerdo para ayudar a Ucrania. La Alta Representante para la Política Exterior y de Seguridad, Kaja Kallas, había diseñado un plan ambicioso de ayuda militar a Kiev valorado en 40 000 millones con aportaciones voluntarias de los países.
El fracaso radica en la realidad de una Unión Europea donde el interés en hacer sacrificios por Kiev varía drásticamente de un país a otro. Las naciones del sur se muestran menos dispuestas que las del este o del norte. Pero al final, incluso Francia, la mayor potencia militar del bloque, se resistió a aprobar el paquete de ayuda.
Desde el comienzo de la guerra entre Ucrania y Rusia, los países occidentales, encabezados por Estados Unidos, han enviado decenas de miles de millones de dólares en armas a Ucrania.
Pero la situación ha cambiado radicalmente desde que el presidente estadounidense, Donald Trump, se acercó a su homólogo ruso, Vladímir Putin, con miras a poner fin a la guerra y, en este contexto, congeló la ayuda militar a Ucrania, al tiempo que puso en duda la fortaleza futura de los lazos con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Rusia acusa a Occidente de echar gasolina al conflicto de Ucrania, al enviar armas letales al país eslavo, y advierte que considerará como objetivo legítimo los cargamentos militares occidentales en el territorio ucraniano.
Berlín ha sido el mayor proveedor de ayuda militar a Kiev después de Estados Unidos. Hasta la fecha, Alemania ha aportado unos 28 000 millones de euros a Kiev desde que comenzó la guerra hace más de tres años.