Aunque destacó sus logros, el Departamento de Estado instó al Gobierno a lograr «avances inmediatos y tangibles» para erradicar el narcotráfico.
El Departamento de Estado de EE.UU. presentó esta semana ante el Congreso su informe anual sobre la Estrategia Internacional para el Control de Estupefacientes (INCSR, por sus siglas en inglés), en el que destacó los avances logrados por el Gobierno de Colombia durante 2024.
Este jueves, la Presidencia de Gustavo Petro emitió un comunicado celebrando que la Casa Blanca resaltara en su análisis el récord histórico en interdicción de la cocaína el año pasado, que «presentó un aumento de 14 % frente a 2023, además de un crecimiento en la incautación de precursores químicos».
Sin embargo, a poco de su publicación, el Departamento de Estado hizo desde sus redes sociales una aclaración, dando a entender que el informe no era tan benévolo como había interpretado Bogotá.
«La política nacional de drogas de Colombia tiene objetivos admirables, pero es momento de ver resultados. Debido al récord de cultivos de coca, el gobierno necesita lograr avances inmediatos y tangibles en la erradicación, para el beneficio y la seguridad de nuestras naciones», dice un posteo de X de la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos (INM, por sus siglas en inglés).
En el mensaje, el organismo, que depende del Departamento de Estado, menciona las cuentas de Presidencia de Colombia y su Cancillería.
Entre tanto, en el comunicado del Gobierno de Petro se mencionan tanto las medidas resaltadas por Washington como el reclamo por mayores esfuerzos. «El reporte EE.UU. acogió con satisfacción la Política Nacional de Drogas 2023-2033 de Colombia, ‘Sembrando vida, desterramos el narcotráfico’, e instó a Colombia a acelerar su aplicación, incluyendo los esfuerzos de erradicación».