El hallazgo ha provocado conmoción porque muestra los niveles de violencia ejercidos por las organizaciones criminales.
Madres buscadoras de desaparecidos y medios mexicanos ingresaron este jueves al Rancho Izaguirre, en Teuchitlán, Jalisco, donde fue hallado uno de los llamados «campos de exterminio» del crimen organizado y en el que se encontraron restos humanos, prendas de vestir, zapatos, libretas, bolsos, entre otras pertenencias de las víctimas.
Las madres buscadoras denunciaron que el lugar «parece un museo» porque las autoridades las obligan a pasar por un camino delimitado y en una especie de recorrido. Además, alegan que el sitio fue removido y «se llevaron todo», por lo que se sienten decepcionadas.
De igual forma, dijeron estar indignadas por el poco tiempo que les permiten las autoridades para revisar el centro, que previamente denunciaron como un sitio de entrenamiento de criminales, que, a su vez, funcionaba como campo de exterminio.
Tal hallazgo ha provocado una conmoción en México y la comunidad internacional, porque muestra los niveles de violencia ejercidos por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
En varios videos difundidos en redes sociales, las madres de desaparecidos expresan su descontento e indican que hubiese sido mejor que ellas realizaran la búsqueda de restos en el lugar, porque sienten que las autoridades no lo hacen correctamente.
«Es una incertidumbre no saber si tu familiar, tu hijo, pasó por este campo», dijo una madre. En una de las grabaciones se observa a una buscadora desesperada tirada en el piso mientras golpea el suelo y dice: «Está hueco», para luego señalar que en ese sitio, que permanece sin ser revisado por las autoridades, podrían haber restos de las víctimas.
Durante la jornada, algunos colectivos y organizaciones de derechos humanos denunciaron que las autoridades no se prepararon para atender debidamente a las buscadoras ni a la prensa. Por ello exigieron a los responsables tener responsabilidad y sensibilidad hacia las familias.
Entre tanto, las madres desesperadas por encontrar algún hallazgo que les permita dar con sus desaparecidos, afirmaron que las labores que realizan hasta el momento las autoridades en el lugar, no sirven «de nada».
Además, reclaman que aún existan zonas restringidas. «Queremos saber qué hicieron las evidencias«, manifestó una buscadora, quien dijo que «no se vale» que solo les permitan estar entre 10 a 15 minutos en el lugar.
¿Qué dijeron las autoridades?
El miércoles, el fiscal general de México, Alejandro Gertz Manero, confirmó que en el Rancho Izaguirre habían rastros de víctimas del crimen organizado. «Sí hay restos humanos», afirmó el funcionario, quien advirtió que aún faltan peritajes para determinar exactamente lo que ocurrió en el predio.
Gertz Manero agregó que aún no se puede determinar con certeza si en este lugar había un crematorio clandestino y un centro de entrenamiento de sicarios, como denunciaron los colectivos de derechos humanos que descubrieron las primeras pruebas.
«No hay todavía un dictamen concluyente, sí encontraron restos, una serie de osamentas (pero) el dictamen que nos hace llegar la Fiscalía del estado (de Jalisco) no nos garantiza la credibilidad y características específicas de esos restos», señaló.
«Esto es un asunto muy importante para la vida pública del país, lo tenemos que manejar con mucha seriedad», agregó al prometer que la Fiscalía General de la República (FGR) a su cargo dará a conocer toda la información del caso.
Para determinar si había un crematorio clandestino, explicó, primero se realizarán pruebas científicas que certifiquen o descarten que en el rancho se incineraron cuerpos. «Hay tal cantidad de pruebas que la verdad va a salir, no tengo ninguna duda», aseguró.
