La reunión se produciría en un momento de tensiones luego de que el presidente estadounidense duplicara los aranceles a los productos chinos.
Según varias fuentes diplomáticas consultadas por South China Morning Post, el presidente de EE.UU., Donald Trump, podría visitar China el próximo mes de abril.
En informes anteriores, se reportó que el inquilino de la Casa Blanca había expresado a sus asesores que quería viajar al país asiático en sus primeros cien días en el cargo, por lo que abril entraría dentro de ese periodo.
Una fuente dijo al SCMP que el mandatario estadounidense había expresado claramente su esperanza de que el presidente chino, Xi Jinping, visitara su propiedad en Mar-a-Lago, Florida, donde ambos ya se habían reunido en 2017, pero Pekín esperaba algo más formal en Washington o invitar a Trump a China.
Por otro lado, otra fuente estadounidense basada en Washington afirmó al diario que se esperaba que Trump visitara China en abril o mayo, y que «muy pronto» podrían surgir «señales reveladoras» del próximo movimiento del líder norteamericano respecto de Pekín.
A ambos mandatarios les gustaría presentar la visita de la otra parte como un triunfo diplomático, de acuerdo con el medio. Trump conversó telefónicamente con el presidente chino unos días después de su regreso a la Casa Blanca y abordaron diversos temas, sin embargo, aún no está claro hasta donde han avanzado las conversaciones sobre un posible viaje oficial.
Por su parte, The Wall Street Journal reportó, con referencia a personas familiarizadas con el asunto, que funcionarios de Washington y Pekín han iniciado conversaciones sobre una posible «cumbre de cumpleaños» en junio en Estados Unidos entre Trump y Xi. El cumpleaños del presidente estadounidense es el 14 de junio, mientras que el de Xi es el 15 del mismo mes. Según las fuentes, las conversaciones se encuentran en una fase inicial y por el momento no se ha concretado nada.
Contexto actual
En cualquier caso, la visita se produciría en un momento de tensiones, después que Trump iniciara una nueva guerra comercial con el gigante asiático, duplicando los aranceles a los productos chinos y, que China a su vez elevara los aranceles a mercancías agropecuarias estadounidenses como respuesta.
Pekín ha explicado en repetidas ocasiones su posición sobre esta cuestión. «No hay ganadores en las guerras comerciales o arancelarias; solo sufrirán los intereses comunes de los pueblos de todos los países», aseveró el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Guo Jiakun.
