Mínimo riesgo para pilotos y aviones, enorme poder destructivo y bajo coste: estas son solo algunas de las ventajas de la familia de bombas inteligentes rusas FAB, que dominan en los campos de batalla.
Tras el éxito de varias ofensivas rusas, la industria de la defensa nacional anunció en 2024 que había multiplicado la producción de bombas de aviación FAB-500 y duplicó la producción de FAB-1500, y desde febrero de este año se ha iniciado la producción en masa de FAB-3000.
¿Qué son las bombas de la familia FAB?
Desarrolladas como unas simples bombas de caída libre durante la época soviética, estas municiones se han convertido en armas de precisión y de largo alcance al incorporar un módulo universal de planeo y guiado (UMPK, por sus siglas en ruso) de alto poder explosivo, que prácticamente arrasan las líneas de defensa enemigas, sus refugios y fortificaciones con una precisión despiadada.
Las tres bombas se diferencian entre sí principalmente por su potencia explosiva, y los números de sus nombres significan el peso del proyectil: la bomba FAB-500 pesa 500 kilogramos, mientras que la FAB-3000 pesa casi tres toneladas.
Se lanzan desde varios kilómetros de distancia, lo que evita el riesgo de perder aviones y sus pilotos. Otra de sus ventajas es que, en comparación con los carísimos misiles, llevan una enorme carga explosiva y su coste es bajo.
La bomba tiene un amplio radio de destrucción. Por ejemplo, en el caso de FAB-3000, para los objetos situados a menos de 39 metros de la explosión será letal, mientras que los enemigos situados a menos de 158 metros pueden quedar conmocionados e incapacitados. A su vez, el radio máximo por la fragmentación alcanza los 260 metros.
En general, la FAB-3000 es un arma más potente, diseñada para destruir grandes objetivos, mientras que la FAB-500 es una bomba más versátil para misiones tácticas.
¿Qué es el módulo de planeo y guiado y cómo funciona?
Externamente, esta munición es una bomba estándar con un ala plegable unida a la parte inferior.
En esencia, el módulo universal de planeo y guiado transforma las bombas de caída libre (que en sí mismas son un medio de destrucción simple y destructivo) en un arma de largo alcance y gran precisión guiada por GPS o por el sistema de posicionamiento global ruso GLONASS.
Así, estas municiones pueden ser lanzadas desde decenas de kilómetros de distancia de sus objetivos, lo que las convierte en armas de largo alcance difíciles de interceptar y reduce los riesgos para los pilotos.
La gran potencia de destrucción de las bombas aéreas FAB-3.000 es reconocida tanto por expertos rusos como occidentales. «Tienen una zona de muerte muy amplia, de unos 260 metros, este es el radio de fragmentación. En consecuencia, imaginamos que en la zona donde impacta esta bomba aérea no pueden sobrevivir realmente ni las fuerzas vivas del enemigo ni los vehículos blindados», dijo el experto militar Alexánder Stepánov.
«Por ahora, Ucrania no tiene respuesta a esto», señala la revista The Economist en su artículo sobre estas bombas. «Si ven el cráter que dejan dos bombas de 500 kilos, les impresionará», indica por su parte el analista militar estadounidense Michael Kofman, citado por FT.
Desde 2023, los videos de sus impactantes ataques que horrorizan a efectivos enemigos abundan en Internet.
