Irán rechaza las acusaciones de funcionarios británicos de que representa una amenaza para la seguridad nacional del Reino Unido, y califica las afirmaciones de infundadas y engañosas.
La República Islámica de Irán clasificó de «infundadas y falsas» las acusaciones de funcionarios británicos de que representa una amenaza para la seguridad nacional del Reino Unido.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Esmail Baghaei, aseguró que tales acusaciones no sólo son falsas sino también un intento deliberado de desviar la atención pública.
Criticó al Reino Unido por su largo historial de intervenciones destructivas en los asuntos iraníes y lo acusó de seguir apoyando a elementos terroristas y grupos opuestos a la República Islámica.
Baghaei aconsejó a los funcionarios británicos abandonar su política hostil y dejar de promover el terrorismo. «Pedimos el fin del enfoque poco constructivo hacia Irán y la región de Asia Occidental», añadió.
El Ministro de Seguridad del Reino Unido, Dan Jarvis, anunció recientemente que Irán sería ubicado en el nivel más alto del Sistema de Registro de Influencia Extranjera, requiriendo que las personas que trabajen en nombre de Teherán registren sus actividades o se enfrenten a prisión.