El expresidente de Bolivia, Evo Morales, formalizó este 27 de diciembre su renuncia al Movimiento al Socialismo (MAS), el partido político que dirigió durante más de 30 años y que lo llevó a la presidencia en 2006, por diferencias políticas insalvables con el actual presidente del país andino, Luis Arce.
Morales presentará su candidatura a la presidencia en las elecciones del próximo 17 de agosto por el partido Frente para la Victoria (FPV), aunque aún está pendiente la validación de su candidatura por parte del Tribunal Supremo Electoral. La Constitución boliviana no le permite presentarse a un tercer mandato.
«La renuncia ha sido presentada en resguardo de nuestra Revolución Democrática y Cultural [como se ha conocido a los Gobiernos del MAS desde 2005]. No podemos formar parte de un Gobierno [en referencia al del presidente Luis Arce] que se ha corrompido y ha traicionado los principios básicos y fundamentales», declaró a los medios Héctor Rodríguez, quien presentó la renuncia de Morales ante el Tribunal Electoral Departamental de la región de Cochabamba.
El exmandatario permanece desde octubre pasado en el Trópico de Cochabamba, su bastión político, en un intento por evitar que se ejecute una orden de aprehensión en su contra por una investigación por el presunto delito de trata de personas. Según la Fiscalía de Bolivia, Evo Morales habría tenido en 2015 una relación con una menor de edad, con la cual habrían tenido una hija que ahora tendría ocho años.
Morales dejó de ser el presidente del MAS en noviembre pasado, luego de que los órganos judicial y electoral validaran un congreso realizado en mayo de 2024 que eligió como nuevo líder del partido gubernamental al dirigente campesino Grover García, afín al Gobierno de Arce.
Desde el 24 de febrero, los militantes del MAS leales a Morales comenzaron a renunciar al partido oficialista en respaldo al expresidente, aunque los legisladores evistas, que le son afines al expresidente, se mantendrán en el partido para evitar un proceso por «tránsfugo político» y la pérdida de sus escaños en el Parlamento, reportó el diario boliviano El Deber.
Javier Zavaleta, exsecretario de Defensa en el gobierno de Morales, dijo a una televisora local que el primer paso es la renuncia masiva de seguidores de Morales a la sigla MAS.
De acuerdo con un reporte de El Deber, el vocal del TSE, Tahuichi Quispe, dijo que, en los dos primeros días, renunciaron 1.686 militantes al MAS de los más de un millón de seguidores registrados que tiene el partido oficialista.
Evo Morales ostentó la presidencia de Bolivia en tres ocasiones con el MAS (2006-2009, 2010-2014 y 2014-2019), e intentó obtener un cuarto mandato en el 2019, pero las elecciones fueron anuladas tras un golpe de Estado dirigido por mandos militares y policiales.
La división en el MAS comenzó tras la crisis política de 2019, después de que Morales renunciara a la presidencia y se exiliara en México.
