La alta funcionaria indicó que el panorama de los derechos humanos en Colombia muestra «una catástrofe que no debe continuar».
La fiscal general de Colombia, Luz Adriana Camargo, indicó este viernes que su país se ha convertido en «el más peligroso del mundo» para las personas que se dedican a la defensa de los derechos humanos, una situación que calificó como catastrófica.
«A pesar de su innegable importancia para la democracia colombiana, la situación de los líderes sociales y de los defensores de derechos humanos en el país es alarmante. Para decirlo sin rodeos, Colombia es el país más peligroso del mundo para defender los derechos humanos», expresó Camargo al presentar un informe de investigación y judicialización de delitos contra personas defensoras de DD.HH.
Camargo detalló que, con base en los registros que tiene Fiscalía, la institución ha conocido oficialmente la comisión de «1.372 casos de homicidios contra líderes sociales y defensores de derechos humanos en el periodo comprendido entre enero de 2016 y diciembre de 2024″.
Sin embargo, la fiscal dijo que esa cifra de víctimas está en discusión, porque habría un subregistro de homicidios contra esta población «vulnerable y priorizada», debido a la metodología que se aplicaba anteriormente y en la que solo se contabilizaban a los defensores de DD.HH. porque la de líderes sociales no estaba incluida.
Además, explicó Camargo, las 1.372 víctimas contabilizadas solo corresponden a los casos que la Fiscalía ha registrado como judicializados y que fueron priorizados al tomar como referencia la cifra de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Colombia, un problema estadístico que ya resolvió la Defensoría del Pueblo al aplicar una metodología que incluye a ambos sectores.
La alta funcionaria comentó que, a pesar del subregistro y sobre la base de los datos oficiales que se tienen, el panorama de los derechos humanos en Colombia «es una catástrofe que no debe continuar«.
Además, refirió un dato publicado en mayo de 2024 por la organización Front Line Defenders, que monitorea la situación de los defensores de derechos humanos a nivel global, y que señalaba al territorio colombiano como el más mortal para los activistas.
En ese informe, que tomaba datos de 2023, dijo la fiscal, se «registró un total de 300 defensores asesinados» en 28 países, «de los cuales 142 eran defensores colombianos, es decir, casi la mitad». «Esta es una cifra que a nosotros sí nos tiene que tocar, no solo como Fiscalía, sino como sociedad», expresó.