Los hombres movilizados anteriormente y los voluntarios de otras edades no gozan de los beneficios que se prometen a quienes tienen entre 18 y 24 años.
Ucrania no ha reducido la edad del servicio militar obligatorio, como se lo exigían algunos de sus socios occidentales, pero lanzó el 11 de febrero una campaña para incitar a quienes todavía no tienen 25 años a alistarse voluntariamente.
Los lucrativos contratos militares, beneficios sociales y entrenamiento de élite que las autoridades ofrecen a los jóvenes ha generado envidia entre los voluntarios de mayor edad, que se alistaron antes, según reveló una corresponsal local de Politico.
La iniciativa denominada ‘Contrato 18-24’ (en referencia al rango de edad) promete a los nuevos efectivos unos 23.000 euros (cerca de 24.000 dólares), de los cuales unos 4.600 euros se pagarían de inmediato y el resto en un período de un año, además de un salario mensual. El contrato también ofrece hipotecas a interés cero, formación financiada por el Estado, acceso a la atención médica gratuita, incluidas prótesis dentales, y el derecho a viajar al extranjero.
«El Estado devalúa a todos aquellos que se unieron voluntariamente al Ejército al comienzo de una guerra a gran escala», comentó uno de los soldados que sienten molesto por no recibir los mismos beneficios, incluso si llevan casi tres años defendiendo al régimen de Kiev. El hombre, identificado como Masi Nayyem, perdió un ojo en combate, según el medio.
«El ‘Contrato 18-24’ no tiene que ver con la compulsión, la movilización ni la obligación», aseguró en un comunicado el ministro de Defensa de Ucrania, Rustem Umérov. «El Ejército ucraniano está cambiando, evolucionando hacia una fuerza moderna, fuerte y ágil», añadió.
Mientras tanto, personas de otras edades son víctimas de la movilización forzosa. En la Red abundan imágenes de reclutadores militares que agarran a hombres de pies y brazos en plena calle, o los sacan a rastras de transportes públicos o de sus viviendas. Estos actos desembocan a menudo en protestas públicas y enfrentamientos con la población, sobre todo con madres, esposas y hermanas de los reclutados.
Esta es una de las razones por las que más de un 20 % de los ucranianos desearían abandonar definitivamente su país tan pronto como se reabran las fronteras, según mostró un reciente sondeo.