La apuesta de Bolivia tras la valla fronteriza anunciada por Argentina

La ministra boliviana de Relaciones Exteriores, Celinda Sosa, se manifestó a favor de sostener una agenda que contemple un «conjunto de temas de interés común» para ambos países.

El Gobierno de Bolivia manifestó este martes su intención de mantener un diálogo de «buenos vecinos» con Argentina, a pesar de la construcción en ese último país de una cerca perimetral en la frontera común, informó el periódico El Deber.

Para la ministra boliviana de Relaciones Exteriores,  Celinda Sosa, la instalación de un muro de 200 metros que comenzó a ser montado en la localidad de Aguas Blancas, en la provincia de Salta, no debe generar distanciamiento ni un conflicto diplomático, porque se está haciendo dentro del territorio argentino.

«Es política que tiene cada país. Entonces, para llevar una buena vecindad es importante establecer el diálogo como mecanismo para ver no solo un asunto, sino el conjunto de temas de interés común de ambos países», afirmó la canciller ante la prensa local.

Sosa señaló la importancia de priorizar la agenda bilateral que existe con Argentina, que incluye temas como el migratorio, comercial, energético y académico para los profesionales que estudian en el país vecino.

Este lunes, la ministra argentina de Seguridad, Patricia Bullrich, junto con el gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, puso el primer poste del cerco perimetral, que incluirá alambres de púas y torres de hormigón.

«Fonteras blindadas, narcos amenazados», escribió la funcionaria en un posteo publicado en su cuenta de la red social X.

La provincia de Salta confirmó a finales de enero que construirá un muro de 200 metros de largo y 3,5 metros de altura en la frontera con Bolivia para evitar la migración irregular y el contrabando.

En respuesta, el Gobierno de Luis Arce emitió un comunicado en el que expresó su «preocupación» ante la decisión del país vecino.