Moscú, 4 feb. El canciller ruso, Serguéi Lavrov, confirmó hoy que su país está preparado para elaborar conjuntamente el equilibrio de intereses global, y para ello convocó a los Estados miembros del Consejo de Seguridad de ONU.
«Rusia está dispuesta a un trabajo conjunto honesto para armonizar el equilibrio de intereses y reforzar los principios jurídicos de las relaciones internacionales», remarcó el ministro de Asuntos Exteriores del gigante euroasiático en un artículo de la revista «Rusia en los asuntos globales».
Al respecto, el jefe de la diplomacia rusa recordó la iniciativa propuesta por el presidente Vladimir Putin, de celebrar en 2020 una reunión de jefes de Estados miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas con «especial responsabilidad en la preservación de la civilización», la cual tenía como objetivo «establecer un diálogo igualitario sobre todo el complejo de estas cuestiones».
Lavrov refirió que, por razones conocidas y ajenas a Moscú, la propuesta del líder ruso no se desarrolló.
“Pero no perdemos la esperanza, aunque la composición de los participantes y el formato de tales reuniones puedan ser diferentes», enfatizó.
Asimismo, recapituló las palabras de Putin, según las cuales lo principal es «volver a entender para qué se crearon las Naciones Unidas y adherirse a los principios establecidos en los documentos de la Carta. Este debe ser el hilo conductor para regular las relaciones internacionales en la nueva era de la multipolaridad», argumentó el jefe de la diplomacia rusa.
Por otra parte, afirmó que todos los esfuerzos a los que llama Rusia pudieran verse destrozados con el rechazo del sistema de relaciones internacionales de Yalta-Potsdam con centro en la ONU, lo cual conducirá inevitablemente al caos y a escenarios catastróficos.
Los intentos de reestructurar bruscamente el mundo para adaptarlo a sus intereses, violando el conjunto de principios de la ONU, pueden provocar aún más inestabilidad y confrontación, hasta llegar a escenarios catastróficos, sentenció Lavrov.
En ese sentido, precisó que en el nivel actual de conflictividad en los asuntos internacionales, un rechazo irreflexivo del sistema de Yalta-Potsdam, cuyo núcleo es la ONU y su Carta, conducirá inevitablemente al caos.
El titular de Exteriores insistió que el marco normativo de la Carta del organismo internacional, a su vez, es el que mejor y de forma óptima responde a las exigencias de la era multipolar.
Igualmente, agregó que los principios de igualdad soberana de los Estados, no injerencia en sus asuntos internos y otros postulados fundamentales, incluido el derecho de los pueblos a la autodeterminación, deben observarse no con palabras, sino con hechos.