El mandatario considera que los efectos adversos de sus medidas podrían sentirse «a corto plazo».
El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha reconocido que los nuevos aranceles comerciales a las importaciones provenientes de Canadá, México y China podrían causar «algún pequeño dolor» a corto plazo, pero aseguró que no le preocupa los efectos adversos y que el pueblo estadounidense lo entenderá.
«No, no estoy preocupado. Puede que a corto plazo tengamos algún pequeño dolor, y la gente lo entiende, pero a largo plazo, Estados Unidos ha sido estafado por prácticamente todos los países del mundo», dijo Trump el domingo en la noche en diálogo con periodistas.
El mandatario insistió en que las medidas comerciales eran necesarias. «Se han aprovechado de nosotros y tenemos más de 300.000 millones de dólares de déficit«, manifestó, señalando que la imposición de aranceles a productos europeos «definitivamente ocurrirá». «Veremos si podemos equilibrar nuestro presupuesto. Con la Unión Europea hay un déficit de 350.000 millones de dólares, así que obviamente algo va a pasar […] Yo no diría que hay un calendario, pero va a ser muy pronto», añadió.
Mientras Trump insiste en la necesidad del plan arancelario para frenar la inmigración y el tráfico de narcóticos, además de estimular las industrias nacionales, los expertos advierten que esto podría provocar un alza de precios y afectar el bolsillo de los estadounidenses, así como desacelerar el crecimiento económico global, recoge Reuters.
EE.UU. introdujo nuevos aranceles comerciales a las importaciones provenientes de Canadá, México y China, que entran en vigor en febrero. Asimismo, Trump anunció la semana pasada la imposición de aranceles a la Unión Europea, que —según el presidente— ha tratado «terriblemente» al país norteamericano.