Berlín, 27 ene. El canciller federal alemán, Olaf Scholz, anunció hoy sus planes de deportar a Siria a los delincuentes criminales en medio de un intenso debate interno sobre la inmigración, antes de las elecciones parlamentarias del 23 de febrero.
Durante declaraciones a la emisora pública ARD, Scholz indicó que Berlín mantiene conversaciones con el nuevo gobierno sirio para promover un proceso político inclusivo y la estabilidad en el país, que describió como requisitos previos para posibles deportaciones.
Ellos deben ser devueltos a su país, y queremos hacer cumplir esto siempre que tengamos la oportunidad, sostuvo, al responder a las críticas de la oposición tras varios ataques recientes en Alemania, donde los perpetradores fueron solicitantes de asilo rechazados o inmigrantes ilegales.
¿Llegará un momento en que, por ejemplo, los delincuentes puedan ser devueltos a Siria? Sí. Y espero que sea pronto. Y esa es la preocupación más urgente. Quienes no han logrado establecerse aquí quizás regresen eventualmente a los países de los que vinieron, afirmó.
Scholz remarcó que su gobierno realizó cambios legislativos significativos recientemente para agilizar los procedimientos de deportación de solicitantes de asilo rechazados e inmigrantes indocumentados.
Expresó que su gobierno llevó a cabo con éxito su primer vuelo de deportación a Afganistán en agosto de 2024, al deportar a varios delincuentes violentos.
Sin embargo, enfatizó que iniciar posibles deportaciones a Siria dependería de lograr un proceso político inclusivo y establecer la seguridad y la estabilidad en el país.
El debate interno sobre la inmigración y las deportaciones a Siria y Afganistán se intensificó tras un mortal ataque con cuchillo en Aschaffenburg la semana pasada que dejó dos personas muertas, incluido un niño.
Durante el ataque, llevado a cabo por un ciudadano afgano de 28 años, otras tres personas también resultaron heridas.
Las autoridades confirmaron que el autor tenía un historial documentado de incidentes violentos y problemas de salud mental.
Aunque su solicitud de asilo fue rechazada en junio, la mala coordinación y comunicación entre las agencias estatales impidió que se llevara a cabo su deportación.