Comandante en jefe de Ucrania reconoce que Kiev no podrá ganar si se limita a defender

Alexánder Syrski admite que su país no dispone de sistemas que puedan derribar el misil ruso Oréshnik.

El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Alexánder Syrski, ha reconocido en una entrevista con el medio local TSN que Kiev no podrá ganar su conflicto con Rusia si se limita a defenderse.

«Por mucho que te defiendas, seguirás retrocediendo. Y nos vemos obligados a mantener la defensa y a concentrar nuestras fuerzas prácticamente a lo largo de todo el frente«, expresó Syrski. Preguntado sobre cómo debería lanzar Ucrania acciones ofensivas en medio de los constantes avances rusos en el frente, con decenas de localidades liberadas últimamente, Syrski reiteró la apuesta de Kiev por el uso de drones.

«Fuimos los primeros del mundo en crear las fuerzas de sistemas no tripulados. Ahora estamos desarrollando el componente no tripulado. Estamos desarrollando activamente plataformas robóticas, estamos desarrollando plataformas de combate terrestre», declaró.

En la entrevista, publicada este domingo, Syrski también admitió que, de momento, Ucrania no dispone de sistemas de defensa antiaérea que puedan derribar el misil hipersónico ruso Oréshnik, de alcance intermedio, que Moscú lanzó en noviembre del año pasado en respuesta a los ataques ucranianos contra el interior del territorio ruso con misiles occidentales. En este sentido, admitió que la situación obliga, no solo a impulsar las negociaciones con los aliados que tienen los sistemas necesarios, sino a lanzar el desarrollo del propio sistema antimisiles.

El pasado diciembre, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, afirmó que «no hay ninguna posibilidad de derribar» los misiles Oréshnik, de un alcance de hasta 5.500 km. En este contexto, retó a los expertos occidentales, que están cuestionando la eficacia del Oréshnik, a hacer un experimento. «Qué elijan un blanco de destrucción, por ejemplo, en Kiev. Concentren allí todas sus fuerzas de defensa aérea y de defensa antimisiles, y nosotros lo atacaremos con Oréshnik y veremos qué pasa», propuso el mandatario ruso.

 

 

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