Moscú, 18 ene. Las autoridades de Rusia estudian hoy el flujo de los volúmenes de las futuras exportaciones de gas natural a Irán dentro del proyecto en ejecución de un nuevo gasoducto entre ambos países.
«Estimamos que hay que empezar con volúmenes pequeños, de cerca de dos mil millones de metros cúbicos anuales», reveló la víspera el presidente ruso, Vladimir Putin, tras dialogar con su homólogo iraní, Masoud Pezeshkian.
Al respecto, el jefe de Estado del gigante euroasiático precisó que a medida que avance el proyecto los montos de entrega puede llegar hasta 55 mil millones de metros cúbicos al año.
Putin admitió que existen dificultades en la implementación, pero aseveró que «el programa será realizado».
Por su parte, el mandatario de la nación persa precisó que, para alcanzar estos resultados, «es necesario renovar las rutas de suministro».
Pakistán suspendió en agosto de 2023 su obligación contractual para completar la construcción conjunta con Teherán de un gasoducto, alegando circunstancias de fuerza mayor.
El plan quedó «estancado debido a las sanciones internacionales contra Irán», precisó anteriormente el ministro de Petróleo pakistaní, Musadik Malik.
Las proyecciones de Moscú y Teherán se circunscriben en el nuevo Tratado de Asociación Estratégica Integral rubricado por Putin y Pezeshkian, el cual busca reforzar las relaciones sobre la base de los principios de la igualdad soberana, integridad territorial, independencia, no injerencia en los asuntos internos de la otra parte, respeto de la soberanía, cooperación y confianza mutua.
