El Tesoro de Estados Unidos lanzará el martes ‘medidas extraordinarias’ para evitar el impago

La secretaria Janet Yellen ha enviado una carta de notificación a los líderes de ambas cámaras del Congreso.

El Departamento del Tesoro de Estados Unidos introducirá ‘medidas extraordinarias’ el próximo 21 de enero para prevenir el impago de la deuda nacional, según lo ha advertido la secretaria saliente del Tesoro, Janet Yellen.

En una carta remitida a los líderes de ambas cámaras del Congreso, la alta funcionaria avisa que el martes comienza «el periodo de suspensión de la emisión de deuda» y que se dejarán de financiar plenamente ciertas cuentas, por ejemplo el Fondo de Jubilación e Invalidez de la Administración Pública y el Fondo de Prestaciones Sanitarias para Jubilados del Servicio Postal.

Yellen indica que la duración de las ‘medidas extraordinarias’ o maniobras de contabilidad está «sujeta a grandes incertidumbres, entre ellas la dificultad de prever los pagos e ingresos del Gobierno de EE.UU. con meses de antelación».

La secretaria aclara que la financiación interrumpida se reanuda una vez se suspende o se eleva el techo de deuda, que, de ser alcanzado, «crea el riesgo de que el Gobierno federal no pueda financiar sus obligaciones legales existentes». Por lo tanto, Yellen insta «respetuosamente al Congreso a que actúe con prontitud para proteger la plena fe y el crédito» del país.

A finales de diciembre, el presidente de EE.UU., Joe Biden, firmó el proyecto de ley sobre gastos federales provisionales que garantizó el acceso del Gobierno a la financiación, evitando así su cierre, pero que excluyó las exigencias del presidente electo, Donald Trump, para que se elevara o suspendiera el límite de deuda.

El techo de deuda, o límite de deuda, es la cantidad total de dinero que el Gobierno de Estados Unidos puede pedir prestado para cumplir con sus obligaciones legales vigentes, como el desembolso de beneficios sociales o médicos, salarios de militares, intereses de la deuda nacional, reembolsos fiscales y otros pagos. Para que el Departamento del Tesoro pueda tomar prestado por encima de esa cantidad, el límite debe ser elevado por el Congreso. La deuda federal de EE.UU. se sitúa en torno a los 36 billones de dólares.

 

 

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