El Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) ha comunicado este martes que frustró un intento de los servicios especiales de Kiev de envenenar con una sustancia tóxica a empleados de una empresa de la industria de defensa en la provincia rusa de Yaroslavl.
Los agentes del FSB detuvieron a un ciudadano ruso que, siguiendo instrucciones de la inteligencia ucraniana, planeaba verter en los conductos de aire de los automóviles de trabajadores de la compañía un producto químico capaz de provocar quemaduras potencialmente mortales en las vías respiratorias.
Los dispositivos de comunicación incautados al detenido demuestran que sus actividades terroristas fueron coordinadas desde el territorio de Ucrania mediante aplicaciones de mensajería instantánea extranjeras, agregaron desde el FSB.