MOSCÚ — Ucrania perdió más de 325 militares en los combates en la región rusa de Kursk durante las últimas 24 horas, comunicó el Ministerio de Defensa de Rusia.
«Durante la última jornada, las bajas de las Fuerzas Armadas de Ucrania se situaron en más de 325 militares, fueron destruidos 10 tanques, un vehículo de combate de infantería, un transporte blindado, 11 vehículos blindados de combate, ocho automóviles, tres piezas de artillería y tres morteros», señala la nota.
En total, durante los combates en Kursk, Ucrania perdió más de 49.830 militares, 293 tanques, 217 vehículos de combate de infantería, 159 transportes blindados, 1.511 vehículos blindados, 1.426 automóviles, 344 piezas de artillería y 44 lanzacohetes múltiples, incluidos trece Himars y seis MLRS de fabricación estadounidense.
Además, el Ejército ruso destruyó un total de 16 lanzadores de sistemas de misiles antiaéreos, 89 estaciones de guerra electrónica, 13 radares contrabatería, cuatro radares de defensa aérea, 29 piezas de material de ingeniería y otros equipos, incluyendo 15 vehículos de demolición, una máquina de desminado UR-77, así como siete vehículos blindados de recuperación y un vehículo de mando y control.
El pasado 6 de agosto, las tropas ucranianas irrumpieron en la región rusa de Kursk, ocupando algunas localidades fronterizas, lo que provocó el desplazamiento masivo de civiles. Las fuerzas de Rusia recuperan progresivamente el control de varias localidades, causando fuertes pérdidas a las tropas ucranianas.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, prometió «una digna respuesta» a la provocación de Kiev, al que acusó de disparar indiscriminadamente contra instalaciones civiles, y reafirmó que Rusia logrará todos los objetivos de su operación militar especial.
